POR: Diario la Hora
Una de las promesas de campaña más temidas del presidente Donald Trump se hizo realidad el martes pasado: el mandatario anunció el fin del programa de ‘Acción Diferida para los Llegados en la Infancia’ ( DACA, en inglés), que ha permitido a niños y jóvenes inmigrantes el vivir y trabajar tranquilamente en Estados Unidos sin temor a ser deportados.
La decisión de Trump se veía venir desde su llegada a la Casa Blanca y aunque le dio al Congreso seis meses para pensar un reemplazo, la medida puede dejar en el limbo a no menos de 800.000 inmigrantes, conocidos como los ‘dreamers’ o ‘soñadores’ entre ellos a muchos de origen ecuatoriano.
El programa, puesto en marcha por Barack Obama en 2012, buscaba beneficiar a las personas que llegaron a Estados Unidos como niños y jóvenes indocumentados. De esa forma, el Gobierno buscaba combatir el creciente problema de la inmigración ilegal y al mismo tiempo darle la oportunidad a quienes crecieron en suelo norteamericano.
Lo más grave de la decisión es que estos jóvenes quedarían otra vez a merced de las autoridades migratorias, corriendo el riesgo de ser deportados a países que nunca conocieron y de los que solo han escuchado hablar a sus padres.
La mayoría de ellos son respetuosos de la Ley, pagan impuestos e incluso han servido en el Ejército. Pero tienen una diferencia en comparación con los ciudadanos y titulares de las llamadas tarjetas verdes: no cuentan con residencia permanente. Que Trump haya puesto fin al programa que los protege es vergonzoso y mezquino.
FRASES
El hombre cuya opinión nunca varía es semejante al agua estancada, y
engendra reptiles en su mente”.
William Blake
Poeta y pintor inglés (1757-1827)
Sobre las cosas que no se conocen siempre se tiene mejor opinión”.
Gottfried Leibniz
Filósofo alemán (1646-1716)