Tokio, (EFE)
Un terremoto de una magnitud de 4,8 grados en la escala de Richter sacudió anoche el suroeste de Japón, aunque no se registraron daños personales o materiales, informó la Agencia Meteorológica nipona.
El seísmo se produjo poco antes de la media noche, y su epicentro se localizó a diez kilómetros de profundidad en el interior de la provincia de Oita (isla de Kyushu), y la Agencia Meteorológica descartó la posibilidad de activar la alarma de «tsunamis».
Según la escala nipona de siete puntos, el seísmo alcanzó una intensidad de cuatro en las ciudades de Beppu y Kitsuki, y tres en Bungotakada y Usa, todas ellas en la provincia de Oita.
El terremoto se pudo sentir también en la región colindante de Chugoku, así como en las provincias de Fukuoka y Miyazaki.
Durante toda la noche se registraron una docena de réplicas de menor intensidad cuyos epicentros se fijaron en el suroeste de Japón, y que no produjeron daños.
Se trata del segundo terremoto de más de 4 grados de magnitud en la escala de Richter registrado en los últimos seis días, después de que el pasado sábado un seísmo de 4,6 grados afectase al centro del país, incluida la capital Tokio.
Ese seísmo tampoco ocasionó daños ni activó la alarma por «tsunamis».
El archipiélago nipón se encuentra en una de las zonas sísmicas más activas del mundo.
El terremoto más grave ocurrido en años recientes en Japón se registró en Kobe, oeste del país, el 17 de enero de 1995, con una magnitud de 7,3 grados en la escala de Richter, y causó 6.500 muertos.