Jorge Yánez, presidente del gremio, señaló que están al borde de la quiebra debido a las normas de distanciamiento social, uno de los requerimientos para seguir sería aumentar el pasaje.
Con el paso de semáforo rojo al amarillo, a Quito retornaron aproximadamente 800 buses de transporte urbano, de los 3.000 que circulaban antes de la emergencia sanitaria.
Para circular, las unidades deben ir al 50% de su aforo por disposición del COE nacional, aunque el Municipio de Quito recomendó que se inicie con un 30% y el aforo se incremente con el tiempo.
Sin embargo, Jorge Yánez, coordinador de la Unión de Transporte Intercantonal de Quito (Unitrans-Q), señaló que en 15 días, los buses se irán retirando paulatinamente de las calles.
El dirigente pidió disculpas a los quiteños pero argumentó que “ningún empresario del país pone dinero para entregar un servicio”, señalando que con la reducción de aforo trabajan a perdida. “El trabajo que al momento realizamos no cubre los gastos de operación”, agregó Yánez.
Alza de pasaje
El dirigente indicó ha solicitado a la Secretaria de Movilidad del Municipio de Quito se busque una solución a esta problemática y citó que, durante la alcaldía de Mauricio Rodas, se presentó un estudio técnico para subir el pasaje de 25 centavos a 38. “No se lo trató por temas políticos electorales, la actual administración podría retomar el debate y aprobarlo”, agregó.
Concejo metropolitano no responde
Antes de que los buses vuelvan a las calles de la capital, la Secretaría de Movilidad, dirigida por Guillermo Abad, presentó un informe en el que se solicitaba al Concejo Metropolitano que, durante un mes, exista ‘tarifa cero’ para así evitar contagios a través del intercambio de dinero.
La medida fue abiertamente apoyada por el alcalde, Jorge Yunda, e incluso promocionada en las redes sociales del Municipio, sin embargo; el Concejo Metropolitano se opuso, argumentado que la compensación al sector de transportistas le costaría a la ciudad 8 millones de dólares.
“Compensar a un solo sector no es justo”, dijo el edil Bernardo Abad, en una de las reuniones donde se debatió sin éxito la ‘tarifa cero’.
Mientras que el concejal Marco Collaguazo expuso que lo ideal es cambiar el sistema de cobranza y mantener un control estricto ya que, pese a lo dispuesto por el COE nacional los usuarios han denunciado que los buses no cumplen las medidas de distanciamiento.
Ni la Secretaria de Movilidad, ni el Municipio de Quito se han pronunciado sobre el anuncio de los transportistas urbanos. Desde el 2 de mayo, LA HORA ha solicitado una entrevista a Guillermo Abad, sin obtener respuesta. (AVV)