QUITO
La partida de Rafael Correa y su familia hacia Bélgica no ha pasado desapercibida entre sus seguidores. Los simpatizantes del expresidente se apostaron en los alrededores del aeropuerto de Tababela la mañana de este lunes 10 de junio de 2017. Llegaron en varios buses desde provincias como Guayas, Santo Domingo de los Tsáchilas y Tungurahua.
Un fuerte contigente policial estuvo en la terminal aérea desde temprano y hasta se cerró el carril de acceso a la misma. Correa arribó sobre las 14:30 horas en un vehículo jeep desde donde saludó a sus simpatizantes. Luego intervino desde una tarima improvisada y emplazó «a defender la revolución ciudadana».
Dijo también que no estaba seguro de haber derrotado a la oposición el pasado 2 de abril. Junto a él estaba el vicepresidente Jorge Glas y la asambleísta Gabriela Rivadeneira, que también preside el movimiento PAIS.
No hubo presencia de opositores, pese a que había una convocatoria en redes sociales. En redes sociales, sin embargo, hubo varios mensajes de rechazo como el del historiador Enrique Ayala Mora que escribió en Twitter: “Correa “se va por la puerta grande”. Debe ser bien grande para que pasen su ego, su lengua larga y el peso de la corrupción que va cargando”.
Correa también usó las redes sociales para despedirse. “Llegó el día”, decía el inicio de sus tuits y concluía con lo siguiente: “Nada de lo mediocre y desleal permanecerá. El país ya conoció lo grande, lo correcto, lo bien hecho. El país tiene hoy memoria e inteligencia colectiva”.
El presidente Lenín Moreno, durante la ceremonia de cambio de guardia, dirigió unas palabras a su antecesor: “A nombre del pueblo ecuatoriano, Rafael que tengas un buen viaje. Que Dios te bendiga y que bendiga a toda tu familia. Gracias a nombre del pueblo ecuatoriano por todos los logros de esta década, principalmente en beneficio de los más pobres y desprotegidos», manifestó.