Ser mamá es y ha sido algo importante para mí, porque uno no sabe el significado hasta que llega la hora de conocer y compartir con esos seres que llegan a formar parte trascendental de la vida de una mujer, menciona Ivonne Barba, gerente administrativa de una imprenta y mamá de dos mellizas que, como ella las describe, “son un universo de amor”.
A los 8 meses de embarazo, se enteró de que eran dos niñas las que vendrían al mundo. “No me impresioné porque no sabía realmente lo que significaba tener hijos, a lo mejor si pasaba por una experiencia previa me hubiera sorprendido, como era madre primeriza, solo esperé que lleguen”, agrega.
Emociones
En el hospital, cuando las niñas nacieron, comenta, me las colocaron en los brazos y yo aún no asimilaba. Luego, mi vida iba cambiando, no dormía porque mi tiempo completo les daba a ellas, los gastos se multiplicaron y por esto tuve que vender muchas cosas personales y, poco a poco, me di cuenta del gran compromiso que acarrea ser mamá.
Ivonne asegura que la llegada de sus hijas ha hecho que con su esposo vayan compartiendo las cosas nuevas, las responsabilidades. Y pese a problemas que se han presentado, los han superado y son una familia donde prima el amar y el compartir.
Crecimiento
Durante los 17 años que lleva Ivonne como mamá piensa que le ha llevado a aprender cosas que jamás imaginó, como por ejemplo a tener mucha paciencia, ser minuciosa en sus cosas personales y sobre todo el amor, que como ella asegura es un sentimiento verdaderamente puro e indescriptible que como ser protector le da fuerza para surgir y salir adelante en cada problema o vicisitud que pueda presentarse. (MLY)