Preocupación y temor es lo que sienten varios moradores, comerciantes y transeúntes de diferentes sectores de la ciudad, sobre todo aquellos que donde se encuentra sitios de alojamiento como residenciales, pensiones u hostales.
Según los ciudadanos se vive un ambiente de inseguridad alrededor de estos sitios por el incremento de servicios sexuales que se llevan a cabo allí.
En lugares conocidos como la calle Juan Benigno Vela, Juan León Mera, Olmedo, Luis A. Martínez, avenida 12 de Noviembre, entre otros, se observa la presencia de meretrices, quienes hacen uso de varias residenciales y hostales del centro de la ciudad.
Realidad
Desde el 2017 se viene desarrollando acciones para reducir este ilícito, incluso con reuniones permanentes que se realizaron con los propietarios de estos establecimientos, sin embargo, a raíz de la pandemia provocada por el coronavirus nuevamente se profundiza esta realidad.
Diego Flores, intendente General de Policía en Tungurahua, manifestó que en efecto se evidencia esta problemática en la ciudad, por lo que desarrollan operativos recurrentes en los lugares donde se informa del particular.
“Incluso en uno de estos establecimientos se logró encontrar armas blancas y pipas artesanales que son usadas para el consumo de sustancias sujetas a fiscalización”, dijo la autoridad, al tiempo de comentar que estos ilícitos se encuentran ya en investigación.
Para el Intendente esta problemática social se da a pesar de los controles, por lo que ya se ha dialogado con los administradores o propietarios de los sitios de hospedaje a fin de que conozcan sobre la ley, para posteriormente proceder con los operativos y sanciones de ser el caso.
Según Flores las sanciones son drásticas si se incumple con las normativas y los permisos de funcionamiento, las mismas que van desde 50% de un salario básico unificado y 30 días de clausura hasta el retiro definitivo del permiso de funcionamiento. “Uno de los establecimientos ya se encuentran en estos problemas jurídicos y lo que queremos es que los otros establecimientos no caigan en estos problemas”, dijo.
Preocupación
“A diario y desde la mañana se ve como se hacen los negocios y entran a los hostales, pero no se puede decir, ni hacer nada porque luego vienen a hacer problema en los negocios”, comentó Mayra T., quien atiende un negocio en la Juan Benigno Vela y Mera.
Según la ciudadana antes estos lugares utilizaban los viajeros, los comerciantes, gente que buscaba un sitio para descansar o alojarse, pero ahora ya no llega ese tipo de clientes.
“Ahora son solo personas que van con las chicas y en los alrededores se siente ese ambiente, da miedo andar por el sector, por ello cae las ventas de todos los negocios”, dijo.
Ángel P., quien vive en la calle Juan Benigno Vela, manifestó que desde hace años ya se evidencia este problema y se ha pedido atención de las autoridades, incluso con marchas y plantones, pero no se ha logrado erradicar. (FCT)