El ambientalista Pablo Piedra dice que: o se fortalece el autoritarismo o la democracia.
Es evidente que la gran pasión de su vida son los derechos de la naturaleza. Sin embargo, las dos maestrías del abogado Pablo Piedra abarcan áreas mucho más amplias del mundo de la jurisprudencia: derecho internacional y asesoría jurídica a empresas.
Uno de los periodos más intensos de su vida, en los últimos 10 años, tiene que ver con su activismo en contra de la extracción del petróleo en el Yasuní. De hecho, fue uno de los abogados de Yasunidos e impulsó la frustrada consulta popular. En época de campaña, se da tiempo para hablar con La Hora sobre la segunda vuelta. ‘Ser banquero no te hace ladrón’, dice.
¿El ambiente electoral no le recuerda a cuando recogieron firmas para la frustrada consulta?
Hace una década nos dimos cuenta de que un Tribunal Supremo Electoral de los partidos no representaba a la sociedad civil. El modelo de ahora es aún peor. El CNE no es un organismo independiente.
En el proceso de la consulta popular de Yasunidos también hubo mucho secretismo, la falta de capacidad de auditar el proceso, muchas preguntas sin respuesta. A esto hay que sumar el sistema de propaganda del Estado. Contra los Yasunidos hubo un sistema fraudulento que anuló la mayor cantidad de firmas posibles.
¿Un ambientalista dispuesto a votar por un banquero?
Yo estaría dispuesto a votar por un proyecto que garantice los derechos de las personas y de la naturaleza. Eso implica vivir en un sistema democrático. Estoy convencido de que Ecuador está en una encrucijada: decidimos fortalecer y legitimar un modelo arbitrario, o apostarle a un modelo democrático, donde se pueda criticar institucionalmente las acciones de un Gobierno. Hace una década protestamos contra un sistema político que no era cercano a la gente, con Correa esa situación ha desmejorado ostensiblemente. Estamos peor que en 2006. En la actualidad, si uno pone una acción de protección o una administrativa contra un acto del Gobierno, se pierde. No hay una independencia de poderes. Para ser ladrón, no hace falta ser banquero. Y ser banquero, no te hace ladrón.
¿Apoyará la candidatura de oposición?
En un mundo ideal, yo hubiera preferido una mejor opción. No es así, tenemos que tomar decisiones en tiempos difíciles. Yo no lucho por un banquero, sino por un sistema en el que creo que es el democrático. No creo que ha habido una democracia real en Ecuador, pero hemos tenido mejores momentos que este.
¿Es conveniente un cambio?
Yo estoy convencido de que sí. Los ‘ismos’, pienso yo, en general no son buenos. En realidad, son personalismos. Eso no es democracia. Yo quisiera vivir en una sociedad donde, al terminarse un periodo presidencial, no sea: ‘Después de mí, el diluvio’, como decía Luis XV. Eso quiere Correa: después de él, el diluvio. Y si eso ocurre, regresará. Ecuador no puede estar atado a ese personalismo. Están muy erosionadas las bases democráticas en este país.
¿Hay polarización?
Hoy leí una noticia sobre un dirigente que llamaba a los manabitas a devolver los atunes. ¿A quiénes? ¿A todos los ecuatorianos? Seguramente piensan: ¿Para qué la solidaridad si existe el correísmo? La sociedad ecuatoriana tiene que salir de esto. Hay que reconstruir el tejido social destruido por el Gobierno.
¿El gobierno de PAIS ha mejorado los Derechos Humanos?
Es verdad que se ha generado cierta infraestructura que permite que el ejercicio de ciertos derechos sea más fácil: salud o educación. Aunque todavía el sector privado ofrece mayor calidad. Pero otros derechos básicos, como el de libertad de expresión o a tener un juicio justo, se han visto mermados ante un sistema jurídico controlado por el Gobierno. (MMD)
Frase
«Yo hubiera preferido una mejor opción. No es así, tenemos que tomar decisiones en tiempos difíciles”.
«Ser banquero no te hace ladrón”.