Lenta reactivación para los negocios de comida en Ambato

Situación. Los establecimientos registran muy poca afluencia de gente.
Situación. Los establecimientos registran muy poca afluencia de gente.

Restaurantes y cafeterías en la ciudad reabrieron sus puertas en junio, esto después de casi cuatro meses de inactividad debido a la emergencia sanitaria.

Bajo estrictas medidas de bioseguridad y respetando las disposiciones del Comité de Operaciones de Emergencia (COE) Nacional, los propietarios reanudaron actividades en un escenario complicado.

La crisis planteó un reto para todos los negocios, vender en una época en la que la mayoría de personas se encuentran aisladas en casa se convirtió en el principal problema de los emprendedores, quienes asegura que sus ventas disminuyeron alrededor del 60%.

Ventas

Nancy Balladares es la encargada de un restaurante de comida típica, ubicado en la avenida Bolivariana de Ambato, uno de los sectores del cantón en donde se registraba gran movimiento comercial antes de la pandemia.

En el local trabajaban 12 personas entre meseros, cocineros y ayudantes, la disminución de clientes y por ende de ingresos hicieron que se despida a seis de los colaboradores.

“Antes, durante el fin de semana el local se llenaba, incluso había una fila de carros afuera esperando ser atendidos, ahora de las 20 mesas que tenemos apenas se ocupan seis o siete”, mencionó.

A pesar de las dificultades Balladares es optimista, pues asegura que la gente poco a poco se acostumbra a la nueva normalidad y empieza a acudir a los restaurantes.

Nelly Acosta es propietaria de otro restaurante en la ciudad, según contó la mayoría del día su local permanece vacío, los clientes llegan únicamente a la hora del almuerzo, pero no como antes.

“Tenemos que luchar por nuestros negocios, porque de esto dependen nuestras familias”, indicó.

Nuevas formas para vender

Las entregas a domicilio han disminuido un poco las pérdidas en los negocios de comida, así lo afirma Emanuel Tamayo, propietario de una cafetería, quien indicó que cada día trata de añadir un valor agregado a su producto, ya sea incluyendo postres o haciendo descuentos para sus clientes.

“Nadie estaba preparado para esta situación, la verdad muchos de los vecinos del sector se fueron y dejaron los locales vacíos porque el primer mes no hubo casi nada de ganancia”, dijo el emprendedor ambateño.

Tamayo indicó que es necesario brindarle seguridad al cliente, es por eso que instaló dispensadores de gel y también mamparas de cristal en las mesas. (RMC)