Para el coronel jefe la Policía Judicial de Tungurahua, Dorian Balladares, en la provincia los escándalos (públicos y privados) así como el retiro de ligaduras son acciones que llaman mucho la atención policial.
“La comunidad debe entender que el mantener ese tipo de inconductas no solo dispersa la atención de la Policía sino que también genera focos de contagios que hacen que la contención de la pandemia sea más complicada», dijo la autoridad policial.
Explicó que estas causas siguen sobrepasando el 50% de las atenciones que deben dar conforme a las llamadas al ECU 911.
Esto es ratificado desde la Agencia de Orden y Control Ciudadano que por medio del Cuerpo de Agentes de Control se dio a conocer que se notificó a ocho personas por no usar mascarillas en los espacios públicos, retiró a los comerciantes no regularizados y socializó las medidas de prevención del Covid-19.
Mientras que la Unidad de Gestión de Riesgos en trabajo conjunto con la Gobernación de Tungurahua, Policía Nacional y representantes de las Tenencias Políticas de Quisapincha y Santa Rosa visitaron los centros de diversión nocturnos, de ellos, varios fueron desalojados por incumpliendo del aforo y normas de bioseguridad.
La Dirección de Tránsito, Transporte y Movilidad emitió 14 citaciones por incumplimiento del COIP, ocho citaciones adhesivos por mal estacionamiento vehicular, dos personas fueron detenidas por no poseer licencia y conducir en estado etílico y se retuvo a tres vehículos. La Comisaría clausuró un minimarket por permitir el consumo de bebidas alcohólicas en lugares adyacentes al local, un restaurante por no tener permisos y una licorera por incumplir el horario de funcionamiento.
Para finalizar Balladares añadió que algo que es realmente penoso en la provincia son los niveles altos de violencia intrafamiliar y de género que en la última semana provocó la detención de 10 personas. (NVP)