EE.UU. acudió a las urnas entre esperanza y ansiedad

Biden y Trump auguraron una gran victoria en sus cierres de campaña, antes de las votaciones de ayer.

Los votantes en EE.UU. reclamaron ayer un lugar central en el futuro del país, con una afluencia desigual a las urnas y unas filas que, en algunos centros electorales, comenzaron antes del amanecer con una mezcla de esperanza y ansiedad, debido al ambiente de crispación y fuerte polarización.

En Michigan, uno de los estados clave, las zonas rurales son predominantemente republicanas, mientras que las urbanas, como Detroit, son más diversas con una creciente población afroamericana e hispana, por lo que suelen votar por los demócratas, un fenómeno que se repite en todo el país.

Además de Michigan, el foco está en Texas, un bastión republicano donde ningún demócrata gana la Presidencia desde hace medio siglo, aunque los sondeos mostraron una carrera más ajustada entre Trump y su rival demócrata, Joe Biden, con apenas un punto porcentual de diferencia a favor del actual presidente.

Preocupación en votantes

En otras partes del país, como en Arlington (Virginia), algunos votantes acudían a sufragar preocupados por la situación.

A lo largo y ancho de EE.UU., la afluencia de votantes a las urnas era desigual, debido a la pandemia, que ha hecho que más de 100 millones de personas hayan votado ya por correo o de manera anticipada.

En general, la jornada transcurrió con normalidad, con algunos problemas puntuales. Por ejemplo, un centro electoral de Doylestown (Pensilvania) inició la jornada 15 minutos más tarde de lo previsto y, cuando por fin abrió sus puertas, ya había 300 personas esperando para votar.

Las esperas más prolongadas se registraron en zonas de Georgia, Maine, Nuevo Hampshire, Dakota del Sur y algunos lugares de Michigan.

Trump quiere ‘hacer historia de nuevo’

El actual presidente de EE.UU., el republicano Donald Trump, cerró su campaña en Grand Rapids, con el que fue su quinto mitin de una frenética jornada y un espejismo de 2016, cuando también de madrugada aterrizó en esta ciudad de Michigan para darle la estocada final a la demócrata Hillary Clinton.

«Mañana vamos a hacer historia de nuevo», dijo, al concluir una jornada que empezó en Carolina del Norte, siguió en Pensilvania, hizo una primera parada en Michigan y viajó a Wisconsin antes de regresar al estado de los Grandes Lagos.

Biden confía en ganar Pensilvania

En uno de los cierres de campaña más suigéneris de la historia de Estados Unidos, simultáneamente, frente a un mar de coches aparcados, Biden y su compañera de fórmula, Kamala Harris, llamaron al voto en Pittsburgh y Filadelfia para que Estados Unidos recupere sus valores y su rumbo con la marcha de Trump con una derrota.

«Amigos, tengo la sensación de que vamos a conseguir una gran victoria mañana», aseguró el exvicepresidente en su último gran evento de campaña en una gélida noche en el oeste de Pensilvania.