La mayor operación aérea de la OTAN fue un éxito y una advertencia

Imagen de los ejercicios aéreos. (Foto: OTAN)

25 países participaron en el ejercicio militar. Alemania, que lideró la operación, hizo balance positivo de «Air Defender» y se ve como centro neurálgico de la OTAN.

El inspector general de las Fuerzas Aéreas alemanas, teniente general Ingo Gerhartz, hizo hoy un balance positivo de las maniobras «Air Defender 2023», el mayor despliegue de fuerzas aéreas aliadas de la historia que concluyó ayer, y subrayó el papel de Alemania como «centro neurálgico» de la alianza.

«Mi conclusión es que esta maniobra ‘Air Defender’ 2023 ha sido un éxito total«, no sólo a nivel táctico, sino también humano, afirmó Gerhartz en una comparecencia ante la prensa en la base aérea de Jagel, en el estado federado de Schleswig-Holstein, en el norte del país.

El objetivo de estos ejercicios era mostrar la capacidad de llevar a cabo un rápido despliegue y que los 25 diferentes países participantes «pueden operar juntos desde el primer día, lo que también logramos», agregó.

«Tenemos que entrenar, esto también nos han mostrado estas maniobras», dijo.

Subrayó, además, que precisamente debido a su situación geoestratégica, geográfica y geopolítica, Alemania debe verse a sí misma como «centro neurálgico» y ser capaz de albergar fuerzas de la OTAN, también en lo que respecta a las fuerzas terrestres.

Precisó que de los dos mil vuelos planeados se realizaron 1.800, lo que supone una tasa de cumplimiento del 90 %, que para una maniobra de estas dimensiones es «un valor muy, muy bueno», subrayó.

Sólo un día apenas hubo vuelos y prácticamente se paralizaron los ejercicios debido al mal tiempo.

De tratarse de una situación real «naturalmente volaríamos aún con tormenta», pero en este caso, la seguridad en vuelo tenía la máxima prioridad, indicó.

En general, los ejercicios, que se extendieron durante nueve días, se desarrollaron «sin contratiempos» y gracias a la buena planificación del control aéreo alemán, no hubo cancelaciones en el tráfico aéreo civil y, en todo caso, «retrasos de unos pocos minutos», celebró.

Así, de los 55.000 minutos de retrasos diarios que según las estimaciones previas causarían estas maniobras, esta cifra quedó reducida aproximadamente a la mitad.

Por otra parte, hablo de un «mensaje muy, muy importante» que se desprende de estos ejercicios, y que «no va dirigido contra nadie», sino a la OTAN y a la población en cuanto a que la capacidad de defenderse es un hecho.

No obstante, según la DW, la embajadora de Estados Unidos en Alemania, Amy Gutmann, señaló que sí había la intención de enviar un mensaje bien dirigido. «Me sorprendería mucho que un líder mundial no tomara nota de lo que esto demuestra en términos del espíritu de esta alianza, lo que significa la fuerza de esta alianza, y eso incluye al señor (Vladimir) Putin», aseguró según ese medio alemán.

En un mensaje en Twitter, la Fuerza Aérea alemana precisó que en estos nueve días de ejercicios participaron más de 10.000 soldados de 25 naciones con 250 aviones.

En total se realizaron 808 misiones en 1.808 vuelos de los 2.034 previstos.

En las 24 operaciones aéreas compuestas, conocidas como COMAO (Composite Air Operation) y que implican la combinación de varios tipos de aviones con capacidades diferentes, como por ejemplo de reconocimiento, cisterna y cazas, participaron una media de 52 aparatos en cada una. (EFE/DLH)