El trayecto dura cerca de dos horas, los participantes se dejan llevar por la corriente hasta llegar al recinto El Limón.
La crecida del río Congo, ubicado en El Empalme (Guayas) es aprovechada cada semana por decenas de personas que optan por participar en los tubopaseos.
Cada año esta actividad gana más simpatizantes, pues el recorrido es emocionante y la adrenalina sale a ‘flor de piel’, según quienes intervienen.
Son cerca de dos horas que dura el recorrido, en el que se deben sortear obstáculos como la fuerte corriente, ramas de los árboles que llegan al agua, maleza crecida y otros elementos.
Para formar parte del tubopaseo, los integrantes se reúnen en la ‘Toma de Agua Potable’, situada en el sector Manabí – Coromoto, de allí, en tubos se dejan llevar por la corriente hasta llegar al puente del recinto El Limón.
‘‘Ya llevo cuatro años participando, nos reunimos con los primos y otros amigos y nos vamos en grupo, en serio que nos relajamos bastante’’, sostuvo Luis Macías, joven de 19 años de edad.
Fauna
En el trayecto se pueden encontrar ciertos animales como iguanas, osos perezosos, aves exóticas, tortugas y hasta serpientes.
‘‘Siempre bajamos por el río con cuidado, igual no nos confiamos, y lo mejor es cuando llueve’’, refirió entre sonrisas Pablo Macías, otro de los participantes.
Al llegar al recinto El Limón se pueden degustar una variedad de alimentos preparados con productos típicos de la zona; entre ellos: empanadas, corviques, chifles con ensalada y mayonesa y maduros emborrajados. También mangos con sal, bebidas y más delicias. (JO)