‘Silueta del Cristianismo en el Ecuador Colonial’, obra inédita de Manuel Ygnacio Monteros

‘Silueta del Cristianismo en el Ecuador Colonial’, obra inédita de Manuel Ygnacio Monteros
LIBRO: Obra de autoría del científico, historiador, educador y escritor lojano, Manuel Ygnacio Monteros Valdivieso.

El proyecto literario fue presentado e impulsado por la Casa de la Cultura Ecuatoriana Benjamín Carrión Núcleo de Loja y la Fundación Cultural Monteros Valdivieso.

Diego Naranjo Hidalgo, director provincial de la Casa de la Cultura, en la presentación de la obra resaltó que recibió con entusiasmo la propuesta de publicación de la obra, pues, a través de sus páginas, se plantea una visión profunda y reflexiva sobre el papel y la influencia del cristianismo durante la época colonial en el Ecuador, además, descubre la complejidad de la interacción entre la religión y la sociedad ecuatoriana en aquel periodo. El cúmulo de sus acciones lo convierten en un ser humano de firmes convicciones, cuya grandeza moral e intelectual traspasan barreras del tiempo.

La obra es un ensayo histórico completo sobre el papel del cristianismo en nuestro país. A pesar de que este libro fue escrito hace 70 años, es la primera vez que se presenta como un ensayo histórico completo, explica José María Monteros, sobrino del autor y promotor de la publicación. Recuento histórico; régimen a contrapelo; religiosidad ecuatoriana; cultura laica y religiosa; misterios donde la lógica falla y semblanza a la beata Marianita de Jesús, la Azucena de Quito, a propósito de su canonización, son algunos de los capitulos que aborda. El libro se encuentra en circulación desde abril de 2024 y puede adquirirse en la CCE – Núcleo de Loja.

MARCA. Logo identificativo del artista lojano.
PRESENTACIÓN: José María Monteros en representación de la Fundación Cultural Monteros Valdivieso y, Diego Naranjo Hidalgo, director provincial de la Casa de la Cultura de Loja.

Del autor

Manuel Ygnacio Monteros Valdivieso nació el 19 de abril de 1904, proviene de una familia de agricultores. Cultivaban árboles frutales, caña de azúcar, café y tabaco. Fue el tercero entre cinco hermanos. Perteneció a la generación de Benjamín Carrión, Pablo Palacio, Manuel Agustín Aguirre, Juan José Samaniego Burneo, Pedro Víctor Falconí, Carlos Manuel Espinoza, Clotario Maldonado Paz, Demetrio Aguilera Malta, entre otros intelectuales.

En el año 1929, con otros dos compañeros de aventura, se dirigieron a Guayaquil donde tomaron un barco rumbo a Francia, con la intención de estudiar medicina, en este trayecto hicieron una escala provisional en La Habana, sin embargo, su paso por esta tierra se hizo definitiva para el resto de su vida. Falleció el 23 de enero de 1970.

El destacado médico Gregorio Delgado García, autor de la revista Cubana de Salud Pública, lo describe como un hombre de exquisita sensibilidad a todas las manifestaciones de la cultura, de corte sencillo y quien jamás se preocupó de títulos, ni grados docentes, ni condecoraciones. Fue el único docente que permaneció fiel a la revolución en la cátedra y como el primer profesor no médico ni graduado universitario de la Facultad de Medicina de la Universidad de La Habana.