Autoridad saliente en rendición de cuentas dijo que ha atendido a barrios, pero dirigentes reclaman obras. Hay una lista de necesidades para Quezada.
Falta de atención a la vialidad, fortalecimiento de la seguridad, implementación de servicios básicos como: sistemas de alcantarillado, servicio de agua potable y mantenimiento de áreas verdes, al igual que la intervención al relleno sanitario y al sistema de recolección de desechos sólidos, son algunas de las necesidades que no han podido ser satisfechas por la actual administración municipal de Patricia Picoita, y que quedan de herencia para el nuevo alcalde entrante, Franco Quezada.
Necesidades
Sixto Alvarado, presidente de los barrios de Loja, manifestó que la actual administración que fenece y las anteriores le quedan adeudando a Loja mucho, en varios temas como: agua potable, alcantarillado, seguridad, recolección de basura, vialidad y obras de infraestructura que no se ha visto en los últimos años. “En el caso del agua potable es uno de los principales problemas que tiene Loja y que ningún Alcalde ha podido resolver. El inconveniente estaría en la línea de conducción, y eso queda como herencia al alcalde electo, Franco Quezada”, dijo.
Además quedan otros problemas insatisfechos que no han conseguido ser solventados como la inseguridad en los barrios, la falta de obras de alcantarillado, y el poco interés entregado a la vialidad urbana y rural, ya que circular por Loja es todo un calvario, por la cantidad de huecos y fisuras existentes. Barrios como: Ciudad Victoria, Jardines de Punzara, Héroes del Cenepa, Belén, El Plateado, entre otros, tienen presencia de fallas geológicas y no han sido intervenidos de manera definitiva, únicamente con obras de mitigación en el caso de Ciudad Victoria.
Presupuesto
Según Alvarado, la actual administración de Picoita tomó recursos de los presupuestos participativos de los barrios para obras que no estaban planificadas como el caso del asfaltado de la calle Santiago de las Montañas. “Había dinero de los presupuestos para casas comunales, alcantarillados, canchas, entre otros, pero no se ha hecho nada de lo que la gente necesita. El nuevo Alcalde debe realizar un seguimiento para ver qué se hizo con el dinero, a dónde fueron los proyectos y peticiones de la gente que requerían obras urgentes”, relató.
Finalizó que como dirigente de más de 260 barrios en diálogos con ellos, varios sectores quedan insatisfechos por la falta de obra de la autoridad saliente. El asfaltado de algunos barrios a cargo de Simar, las mingas en barrios, y otras obras pequeñas, fueron proyectos y actividades que las venía ejecutando el anterior alcalde, Jorge Bailón Abad (+). “El resultado de las urnas fue claro, nadie quiso que la actual alcaldesa Picoita liderada por su hijo pueda continuar en el poder”, relató.
Expectativa
Ahora la expectativa está puesta en el nuevo Alcalde entrante, Franco Quezada, quien asume funciones este 14 de mayo. Existe un listado de pedido de los barrios como: solución a los cortes de agua potable, falta de alcantarillado, mantenimiento y asfaltado de las calles ya que actualmente los daños en los vehículos son innumerables por la presencia de huecos. El relleno sanitario debe ser reubicado porque los malos olores siguen afectando a los barrios cercanos, se suma la recolección de basura y la implementación de cámaras en los barrios para evitar la inseguridad como robos y asaltos, solicitó Félix Naranjo, habitante del sector sur de la ciudad.
Barrios de Loja en el olvido, hay una serie de necesidades insatisfechas. Los principales problemas de agua potable y vialidad.