La Casa de la Cultura Ecuatoriana Benjamín Carrión, a través de sus 24 núcleos provinciales, tras el reciente recorte presupuestario realizado por el Gobierno Nacional, presentan su rechazo ante la medida adoptada que supone una reducción de más de 170,000 dólares destinados a la cultura. Este acto se traduce en un atentado a la diversidad y riqueza cultural de las provincias del país.
En respuesta a esta situación crítica, Fernando Céron, presidente de la Sede Nacional, en conjunto con los directores de los 24 núcleos provinciales, decidieron tomar medidas enérgicas para proteger los derechos culturales, presentando una Acción de Protección, con el fin de asegurar los recursos necesarios para el desarrollo y la promoción de la cultura en el país.
Esta acción busca salvaguardar los derechos constitucionales de la institución que han sido afectados por varios recortes presupuestarios en el transcurso del presente periodo gubernamental. El recorte ha tenido un impacto directo en los 24 Núcleos Provinciales y la Sede Nacional, afectando los derechos a la cultura, al trabajo y la asignación presupuestaria suficiente para la ejecución de políticas culturales, según lo establecido en la Constitución de la República del Ecuador.
La Acción de Protección será entregada el miércoles 11 de octubre de 2023, en la ciudad de Quito. El punto de encuentro será en la Casa de la Cultura Ecuatoriana, Av. Patria 6 de Diciembre, a partir de las 9:00 y luego caminarán hasta la Unidad Judicial “Mariscal Sucre”, para exigir justicia presupuestaria.
Este gesto simboliza la determinación y el compromiso inquebrantable de la Casa de la Cultura Ecuatoriana en la defensa de los derechos culturales de todos los ciudadanos, en contra de la violencia y a favor de la creación, difusión y protección cultural como semilla de paz y progreso. La inversión en arte, cultura y educación es un camino que nos permitirá superar la crisis y construir un futuro mejor y menos violento.
Es de suma importancia preservar y fortalecer nuestro patrimonio cultural, pues constituye una parte esencial de nuestra identidad nacional. Es imperativo reconocer a la cultura como un elemento necesario para el desarrollo sostenible, la cohesión social y la seguridad de la población.