Como cada año doña Yolanda Cabrera arregla en su propia casa el nacimiento del niño Jesús.
Redacción OTAVALO-INTERCULTURAL
A más de mantener la tradición de elaborar el ‘Auténtico Yamor’ y el plato típico, otra de las virtudes de doña Yolanda Cabrera, es arreglar el pesebre más grande de la ciudad. Con dos meses de anticipación junto a su hija Anita, empieza a desempacar las grades maquetas y juguetes, que se van colocando en cada uno de los rincones del patio de su casa; la tarea es ardua, pero a medida como van pasando los días, el lugar se va transformando en uno de los nacimientos del niño Jesús más visitados de Otavalo.
Son alrededor de 5.000 piezas que componen este pesebre, cuya dimensión es de 12 metros de largo por seis de ancho. Entre las maquetas que llaman la atención está la Casona Municipal, con la representación de los miembros de la Banda, ubicados en el Pretil del sector. A más de esta, también existen otras que representan a lugares muy conocidos como la Gruta del Socavón, el Hospital San Luis, las iglesias de la ciudad, el cementerio y hasta el mismo sitio tradicional donde se elabora el ‘Auténtico Yamor’.
Tradición familiar
Para doña Yolanda, armar el belén es una tradición que la viene haciendo desde hace muchos años, en sus inicios su intención fue hacer un pesebre pequeño, pero con el pasar de los años se le ocurrió ocupar todo el espacio del patio de casa, para esto mandó a elaborar varias maquetas de los sitios más conocidos de la ciudad, cuyo decoración se complementa con la infinidad de juguetes que se acoplan en las diferentes áreas.
“Nuestra aspiración es hacer todos loa años el belén, donde se pueda compartir con los niños y las personas católicas, porque es un tiempo de solidaridad con nuestros semejantes; por eso realizaremos la novena que se iniciará desde 16 hasta el 24 del presente mes; esta es una oportunidad para rezarle y cantarle al niño Dios, junto a los niños y sus familias que vendrán en esta época de Navidad”, expresó doña Yolanda.
Fe
Anita Albuja, su hija, quien le ayuda en la tarea de arreglar el pesebre, cuenta que el niño Jesús de este nacimiento tiene su historia. “El niñito viene de nuestros antepasados, se cree que tiene alrededor de 180 años; muchos de los devotos que vienen a la novena tienen fe, porque según sus testimonios, les ha cumplido con sus pedidos”, dice Albuja.
La ciudadanía podrá visitar este pesebre desde el próximo domingo 16 de diciembre cuando estará completamente terminado, y estará expuesto hasta el Miércoles de Ceniza, porque para ese día se tiene previsto realizar la misa, donde los devotos participan con una procesión desde la iglesia hasta el domicilio de doña Yolanda.
Pasada esta fecha se empieza a desarmar el pesebre, que es otro trabajo laborioso guardando cuidadosamente cada una de las piezas en grandes cajas, las mismas que permanecerán almacenadas hasta diciembre del próximo año. (PMHR)