En Ibarra, al menos 30 planteles reportan fallas en su infraestructura para poder acoger a todo el alumnado desde el 14 de marzo de 2022.
Redacción IMBABURA
El retorno total a las clases presenciales, en todos los niveles educativos, se dará este 14 de marzo de 2022, tras casi dos años de la pandemia de COVID-19.
Desde el nivel inicial hasta el bachillerato, todos los estudiantes dejarán de lado las lecciones virtuales y los sistemas híbridos, para regresar a las aulas en cada una de sus instituciones educativas.
La disposición la dio el COE Nacional, junto al Ministerio de Educación. Una primera fase de este proceso de retorno total a las aulas se dio el 7 de febrero de 2022, cuando se inició el segundo quimestre del año lectivo 2021-2022 en la Sierra y Amazonía.
En esa fecha, comenzaron las clases presenciales obligatorias, con 100% de aforo, para estudiantes de los niveles de bachillerato y básica superior; así como en todos los planteles del sector rural, pero ahí sí desde primer grado de educación general básica, hasta tercero de bachillerato.
Problemas en Ibarra
Para volver a las aulas cada institución debe presentar un Plan Institucional de Continuidad Educativa (PICE), que lo aprueba el Ministerio de Educación, donde, principalmente, se toman en cuenta los protocolos de bioseguridad que se aplicarán, como uso permanente de mascarilla, distanciamiento, así como el estado de la infraestructura de cada plantel.
En este último punto, en la capital de la provincia de Imbabura, al menos 30 instituciones educativas presentan problemas en sus espacios físicos, por lo que desde las autoridades se analizan alternativas para reubicar a los alumnos en otros espacios de la ciudad.
Problemas en los techos, en baños y áreas de uso múltiple son los que si no se solventan no permitirán que los estudiantes retomen la presencialidad.
Desde el Ministerio de Educación informaron que la mayoría de estos planteles no corresponden a niveles educativos de bachillerato o básica superior, sino que son instituciones que acogen a niños pequeños, como centros infantiles.
Sin embargo, en casos como el de la infraestructura educativa junto al Obelisco de la ciudad, donde luego funcionaba un bloque de la Unidad Educativa Ibarra, antes escuela Pedro Moncayo, ya se trasladó a los alumnos a las aulas del ex Lidia Sevilla, tras el camal, mientras se consigue recursos para intervenir en la sede que es considerada patrimonial.
Con este tipo de medidas, las autoridades educativas locales buscan solucionar los problemas que presentan los centros formativos, mencionando que la cartera de Educación determinará cuando sea pertinente implementar ciertos planes de contingencia en instituciones educativas seleccionadas.
“Estos planes se definen como estrategias innovadoras para garantizar la continuidad del servicio educativo para estudiantes que están matriculados en instituciones educativas que, por ejemplo, por deterioro de la infraestructura, no pueden retornar en jornadas completas a la presencialidad. De esta manera, se asegura la integridad física de estudiantes y docentes, su salud y la calidad educativa”, expusieron desde el Ministerio de Educación.
“Las clases presenciales son de gran importancia para la formación de las habilidades cognitivas, físicas y sociales de los estudiantes. Por esta razón el Ministerio de Educación trabaja continuamente para que el retorno a las aulas se lleve a cabo de manera segura, cumpliendo con todas las condiciones de bioseguridad, para garantizar el derecho a la educación de los niños, niñas y jóvenes del país”, comunicaron.
Desde los padres de familia, por otra parte, también se hacen esfuerzos para poder adecuar los espacios con problemas y que sus hijos vuelvan a las aulas, pues están a la expectativa de que retomen cuanto antes la educación presencial.
En la unidad educativa 28 de Septiembre, por ejemplo, se han organizado mingas para que todo el plantel quedé listo para el regreso general a clases, por lo que esperan, durante la semana, solventar todas las necesidades y enviar a los estudiantes a las aulas el 14 de marzo.
122 instituciones educativas de Ibarra laboran con más del 80% de asistencia a clases presenciales.