Se levantó capilla ardiente a policía que fue abatido por delincuentes

Se levantó una capilla ardiente en el comando de la Subzona Esmeraldas para el servidor policial esmeraldeño Eduardo Perlaza que perdió la vida  en Santo Domingo a manos de delincuentes

El lunes en horas de la tarde antes de efectuarse el proceso de entierro al cuerpo del uniformado abatido fue recibido en la capilla ardiente preparada en el cantón Esmeraldas. El sargento Eduardo Perlaza perdió la vida tras frustrar un asalto y robo en la provincia aledaña.

El sargento segundo nació el 15 de mayo de 1981 en la provincia de Esmeraldas y su infancia la compartió junto a sus padres. El 01 de noviembre de 2003 con motivación inicia su postulación a la escuela de formación de policías y luego de un proceso académico y práctico se incorporó al servicio de servir y proteger. Efectuando sus labores  en el Comando Provincial Nro. 1, servicio rural; aquí marco su espíritu de solidaridad, proactividad a favor de la comunidad.

Antes de la eventualidad que cegó su vida el policía laboraba en el servicio de antinarcóticos de la Subzona Pichincha. En su trayectoria obtuvo varios reconocimientos al mérito profesional en cumplimiento de los objetivos y metas institucionales.

Ataque

La madrugada de este 17 de octubre, mientras se registraba un asalto en una gasolinera en Santo Domingo el policía evitó este suceso. Esta vez, la delincuencia arremetió en contra de la vida del servidor policial, ocasionándole la muerte instantánea. El incidente se registró en el kilómetro 4 y medio de la vía a Quinindé. El servidor policial estaba en el lugar, de pronto unos antisociales amedrentaron a los dueños de la estación de servicio y quisieron llevarse el dinero.

Sometieron a los trabajadores y a uno de los clientes, sin percatarse que se trataba de un servidor policial, sin dudar, el sargento Eduardo Perlaza, enfrentó a los delincuentes, ofrendó su vida a cambio de la seguridad de todas las personas que se encontraban en el lugar y abatió a uno de los criminales.

Por otro lado, los otros integrantes de esta organización delictiva abrieron fuego en contra de la integridad del agente del orden y luego de un cruce de disparos, estas balas asesinas cegaron la vida de Eduardo Perlaza a sus 41 años de edad.