¿Qué hace la CONAIE en tiempos de Paz?

Es una pregunta honesta, de una ecuatoriana que no es parte del, más o menos, millón cien mil indígenas que viven en el Ecuador

Como persona externa a los beneficios que debe traer ser parte de los confederados a la Conaie, lo único que conozco de ellos es que tienen elecciones regulares, que se organizan en los paros y que llaman a las bases cuando necesitan paralizar el país.

Pero ¿en tiempos de paz? ¿Cómo aportan a sus agremiados? Me pregunto si con el financiamiento que tienen, o que deben tener para funcionar, ya sea con aportes de comunidades, o de organismos multilaterales, ¿en estos 35 años de existencia han generado proyectos para mejorar la calidad de vida de sus afiliados?

Tal vez la estructura de dirigentes estudiados ha logrado generar un mecanismo para becar a estudiantes indígenas para que puedan acceder a buenas universidades; formar médicos de las propias comunidades; indígenas nutricionistas que, conociendo su cultura y tradiciones, puedan aportar para disminuir las tasas de desnutrición infantil en Ecuador. O profesores, que ayuden a que los niños indígenas abran los ojos a un mundo enorme más allá de sus fronteras. O políticos, que puedan acceder a carreras de ciencias políticas y sean un ejemplo de honestidad y trabajo en el puesto político que se desempeñen dignamente y no perdiendo el tiempo cuando se constituyan en un bloque considerable dentro de la asamblea y legislen…

¿Tienen programas exitosos de capacitación en técnicas agrícolas?

¿Buscan o generan capacitaciones para buenas prácticas ambientales o de higiene en territorios?

¿Gestionan o informan de oportunidades de recursos y líneas de crédito para que sus agremiados consigan insumos a buenos precios?

¿Manejan programas de comercio justo de las comunidades productoras con los distribuidores finales?

¿Tal vez ayudan a las personas indígenas a educarse en el amor y el respeto para evitar violencia intrafamiliar?
¿Realmente trabajan para que sus agremiados sean personas pensantes, con capacidad de discernimiento, que puedan aportar al país en el que vivimos y dejen de ser parte de la población más empobrecida del Ecuador?

¿Buscan que cada uno de sus agremiados se desarrolle como un ser humano que viva en plenitud de sus capacidades, de forma digna, o esperan que solo sigan siendo “las bases” que movilizar a voluntad del dirigente de turno?

Me sigo preguntando ¿Qué hacen los dirigentes de la Conaie cuando no están en paro?

Autor: María del Rosario Dueñas