Arroz, aceite, granos y otros productos no perecederos contiene cada uno de los 150 kits que la Agencia de la Organización de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) en conjunto con el Fondo Ecuatoriano Populorum Progressio (Fepp), entregaron a la comunidad a través del Municipio de Atacames.
“Pedimos siempre que las entregas sean 50-50, es decir a personas que se encuentran en movilidad sean venezolanos y colombianos y el porcentaje restante habitantes de la localidad en extrema pobreza”, precisó Jimmy Córdova coordinador regional del Fepp.
Y detalló que para llegar con las ayudas determinan criterios de vulnerabilidad, es decir que sean familias de escasos recursos económicos, en función de que el proyecto ejecutado por ellos, y financiado por Acnur, llegue realmente a quienes verdaderamente lo necesitan.
Reciprocidad
Elicenia Vélez Vélez, presidenta de la Unidad de Acción Social del Gobierno Municipal de Atacames sostuvo que hoy por hoy es cuando más hay que poner en practica la solidaridad. “Nuestros hermanos migrantes en algún momento fueron solidarios, ahora nos corresponde ser recíprocos, para ellos contamos con aliados estratégicos como Acnur y Fepp, quienes contribuyen para brindarles un aliciente a nuestros hermanos venezolanos y colombianos”, resaltó.
Agregó que es fundamental contar con el respaldo de estas Organizaciones no Gubernamentales que brindan cobertura a los desplazados, pero que a la vez también llega a ciudadanos de Atacames que están en condiciones de vulnerabilidad.
Vélez acotó que estrechar estos lazos estratégicos es gracias a la coordinación de la Dirección de Desarrollo Humano Social y Solidario del Municipio de Atacames, a efecto de continuar recibiendo ayuda humanitaria y así canalizarla a la comunidad que tanto lo necesita. (MGQ).