Microbioma: 6 maneras de apoyar a nuestra salud para vivir una plena longevidad

El microbioma de nuestro cuerpo está compuesto de 39 billones de células
microbianas y tiene un rol muy importante para nuestra salud, con grandes
repercusiones en nuestro estado de ánimo y bienestar.

Se llama inmunidad intestinal, estudios demuestran que afecta directamente
a nuestro estado ánimo y actitudes. Cuidarlo es tan importante como cuidar
de nosotros mismos. Estos pequeños organismos desempeñan un papel
integral en nuestra salud, bienestar y longevidad.

Tener esta información en mente, y encontrar tiempo para descansar y hacer
ejercicio, no solo alivia la digestión a corto plazo, sino que está relacionado
con una menor inflamación, un mejor estado de ánimo y una vida más larga.

La relación simbiótica entre nosotros y nuestro segundo yo ha estado
evolucionando desde que los primeros humanos caminaron sobre la tierra.
Tener esta antigua sabiduría en mente puede ayudarnos a elegir alimentos
vivos y ricos en nutrientes y recordarnos que debemos disfrutar de alimentos
modernos altamente procesados con moderación.

1. Buscar el cambio
El cambio es bueno. Un microbioma que cambia a medida que envejecemos
está relacionado con una vida más larga y mejores resultados de salud.
Adaptar la dieta y el comportamiento a medida que crecemos puede
aumentar la longevidad.

2. Ser preactivo
Los prebióticos son alimentos para el microbioma. Pero no es suficiente ni
siquiera necesario tomar probióticos listos para mantener un intestino sano,
ya que siempre es mejor y más fácil lo natural. Los granos, las nueces, las
semillas, las legumbres, los alliums y las verduras de raíz son altas fuentes
de prebióticos dietéticos.

3. Fermentación

Los alimentos fermentados son omnipresentes en las culturas antiguas
porque son la mejor manera de preservar la cosecha, son deliciosos y
mantienen nuestra microbiota feliz para que pueda mantenernos vivos.
Similar funcionan las comidas comunes callejeras como mango u otra fruta
con limón y sal, aprovéchalo. Ají añadido contiene capsaicina, que ayuda a
regular el proceso de digestión en dosis moderadas.

4. Mantenlo diverso
Un microbioma más diverso se asocia con una disminución del riesgo de
obesidad, enfermedades cardíacas y diabetes tipo 2. El cuidado de nuestra
diversa microbiota incluye comer una amplia gama de alimentos y moderar
las actividades que estresan a los microbios, como tomar demasiado alcohol,
por ejemplo.

5. Saltar el proceso
Una rigurosa dieta alta en alimentos procesados, azúcares añadidos, sal e
ingredientes altamente modificados mata la diversidad del microbioma. Los
alimentos frescos, densos en nutrientes y ligeramente procesados
promueven el crecimiento de bacterias buenas.

6. Duerme
Mantener una buena salud del sueño ayuda a mantener un microbioma
floreciente y viceversa. Ir a la cama a la misma hora cada noche le da al
cuerpo el descanso que necesita para que este órgano inmune pueda
ponerse a trabajar. Guarda esta publicación para cuando te sientas
desconectado o tengas problemas para cuidarte.

Las investigaciones muestran que cuidar de los demás se siente bien, y
cuidar de nosotros y, en particular, de nuestro microbioma, puede ayudarnos
a sentirnos bien, realmente bien.

Dra. Tatyana Starchenko