El talentoso artista Segundo Angulo Bolaños, falleció el viernes 19 de agosto dejando un legado de música, rumba y bohemia.
Segundo Angulo Bolaños, mejor conocido como “Pachangola” nació el 17 de diciembre de 1943 en uno de los barrios más populares de Esmeraldas, “Barrio caliente” sus padres Adolfo Angulo Hernández y Gertrudis Bolaños Montaño.
Sus primeros años de estudios los realizó en el Centro Educacional América, en quinto y sexto grado estudió en la escuela 21 de septiembre.
“Pachangola” desde muy niño tuvo inclinación por el canto, la música se convirtió en parte de su vida ya que su sonora voz animaba y daba alegría a su natal barrio, escuchaba constantemente música de Rafael Cortijo y su combo, así como las cumbias colombianas.
Destacaba siempre en radio Iris donde los cantantes en vivo se promocionaban, Segundo Angulo Bolaños era un participante asiduo, poniendo el sabor y la rumba en aquel espacio.
Un artista joven
En 1953 e la ciudad de Esmeraldas había una agrupación musical denominada “Los Costeñitos”, al que asistía a los ensayos Pachangola con 10 años de edad, fue invitado a ser parte del grupo un día que uno de los integrantes del grupo faltó, empezó con maraca en mano haciendo coro, al director del grupo le gustó el timbre de voz, por lo que se le dio la oportunidad de interpretar una canción y fue en esta orquesta donde nació el seudónimo “Pachangola” siendo su mentor Marcos Micolta Santistevan Director de la orquesta. Fue integrante de este grupo hasta que con el tiempo la misma desapareció.
Crea su orquesta
La agrupación “Combo Canario” se crea en los años 60´s en Esmeraldas siendo Segundo Angulo “Pachangola” su cantante fundador en compañía de Víctor Hugo Becerra en la batería, Luis Roa en la tumbadora, Pedro Ulloa en el bajo Arturo Morán en la guitarra; luego se integraron Zamorano en las congas, Jesús “Chucho” Montero en el trombone, Daniel Castrillón trompeta, y Carlos “la Cera” Quiñónez timbalero; además participó también Jaime Cortés “la cuchamba” como vocalista y tocaba la guitarra, N.N. “el tanque” y Galo René Morillo Meza en los coros.
Esta orquesta obtuvo muchas presentaciones dentro de todo el país donde compartió escenarios con agrupaciones musicales como los Yokers, Los Melódicos, Medardo y sus players, Los azules del Guayas, Los Dinámicos, etc. Grabaron su LP en el año 1970 en el estudio IFESA.
“Pachangola” solista
Con el transcurrir del tiempo el grupo se desintegró por lo que “Pachangola” empezó a realizar sus presentaciones como solista destacando en las improvisaciones a la hora de cantar.
En la orquesta “Memo y su combo” de Tumaco, este artista esmeraldeño contó con una importante participación.
En el año 2004 grabó un disco de Boleros, en el estudio Páez Records.
Segundo alternaba su trabajo en La Empresa Eléctrica, lugar donde laboró por el espacio de 37 años y la música, incursionó también en la comunicación con una programación salsera en Canal Tv Telemar con el programa “fuego en el 23”.
Laboró también en radio Palmeras FM y Radio Central Candela FM.
Falleció una leyenda.
Segundo Angulo Bolaños fue un hombre muy querido en el medio artístico esmeraldeño, falleció la mañana del viernes 19 de agosto después de una enfermedad crónica.
Muchas personas mostraron su tristeza al perder al amigo sonero, muchas fueron las muestras de cariño recibidas entre ellas, su amigo Julio Enrique Micolta Cuero quien le hizo un poema.
A la memoria de Segundo Angulo Bolaños
Eso de que a los amigos
con el alma se los quiere
mayor connotación adquiere
con los rastros de testigos.
Son como brisas y abrigos
que sirven en el ambiente
donde el afecto se siente
en calma o en tempestad,
es que a decir verdad,
ser afable es conveniente.
Razón demás para ver
que con el tiempo más cuaja
esa cualidad que encaja
en ese don del querer.
Si llegamos a tener
en cada amigo a un hermano
capaz de darte la mano
y el abrazo al mismo tiempo
se hermana así el sentimiento
que por bueno es también sano.
Si hay que citar un ejemplo
de esos que no son extraños,
fluye Segundo Bolaños
como tesonero aliento.
Lo cito porque contemplo
a través de su semblanza
una voz que no se cansa
de darnos abrazo y canto,
vale decir por lo tanto
que nos llena de esperanza.
Si ayer nomás lo abrazamos
como se lo merecía
a quien reír nos hacía
y hoy el adiós le damos.
Pero a olvidarlo no vamos
aunque se diga que ha muerto
porque estará despierto
el cantante y el juglar
imposible de olvidar
por ese eterno concierto.
Si mano a mano estuvimos
con el insigne difunto
verso a verso en contrapunto
como en la pista lo vimos.
Y si hasta aquí lo seguimos
al espacio de la tumba,
estamos con él de rumba
por su rumbo extraordinario,
desde el combo canario
de constelación profunda.
Es verdad que estamos tristes,
no podemos ocultar
si vamos a sepultar
su cuerpo con sus raíces.
Sin embargo, tan felices
somos si vemos sus huellas
fulgurando cual estrellas
sobre el verde paraíso
por lo grandioso que hizo
con sus canciones muy bellas.
De Pachangola se queda
además del gran talento
su espíritu en movimiento
que por vital se lo hereda.
Y puede ser que suceda,
hay que tener optimismo,
que él esté ahora mismo
más vivo y colosal que nunca,
porque la parca no trunca
la eternidad con su abismo.
Es por eso que la vida
cuando es buena y generosa
se vuelve maravillosa
si está de amor revestida.
Se deplora la partida
de un auténtico señor,
de Esmeraldas ruiseñor
artista,cantor,rumbero
e intérprete del bolero,
cargado de buen humor.
La lágrima y la sonrisa
a veces muy bien se llevan
si a homenajear conllevan
a la persona precisa.
Y ahora que su alma se iza
sobre la gloriosa ola,
qué suene un piano de cola
acompañando al cantante,
para decirle al gigante:
¡Hasta siempre pachangola!
Julio Micolta Cuero
Esmeraldas, 19 de agosto de 2023