El acoso es una forma de agresión que puede adoptar muchas formas. Por ejemplo, puede ser física, como los golpes o los empujones. También puede ser verbal, como los insultos. El acoso puede ser incluso social, lo que significa ser excluido de un grupo.
Hay varias formas de responder a los acosadores. La mejor manera de protegerte cuando te acosan es saber qué hacer y cómo reaccionar, así como crear un plan de escape si el acoso no cesa. Si te sientes inseguro en la escuela o en el trabajo, cuéntale la situación a un adulto de confianza. Si nada cambia después de seguir estos pasos, habla con un consejero escolar o ponte en contacto con las fuerzas del orden para pedir ayuda.
Conozca los signos del acoso escolar
El primer paso para protegerse contra el acoso escolar es comprender las señales de acoso. Una forma de hacerlo es conocer el código de conducta de tu centro escolar. Si no estás seguro de lo que dice el código de conducta, pregunta al consejero escolar o al director.
Los signos de acoso pueden ser físicos, verbales y sociales:
* Físico: incluye golpes, empujones, zancadillas, patadas y otras formas de violencia.
* Verbal: Incluye insultos, burlas y lenguaje amenazante.
* Social: Incluye la exclusión de los grupos o actividades de los compañeros, como no hablarte o darte la espalda.
Aprender a reaccionar ante el acoso
Lo primero que debes hacer cuando te acosan es saber qué hacer. La mejor manera de protegerte cuando te acosan es saber qué hacer, cómo reaccionar y cómo crear un plan de escape. Asegúrate de contar con un adulto de confianza que conozca tu situación. Si el acoso no cesa después de tomar estas medidas, habla con un consejero escolar o ponte en contacto con las autoridades para pedir ayuda.
Crear un plan de escape
Una forma de protegerte es crear un plan de escape.
Por ejemplo, si te acosan en la escuela, ten un lugar seguro al que puedas ir cuando las cosas se pongan feas. Si el acoso no cesa después de tomar estas medidas, habla con un consejero escolar o ponte en contacto con las autoridades para pedir ayuda. En la mayoría de los casos, los acosadores dejarán de hacerlo cuando sepan lo que ocurrirá si no se detienen.
Saber a quién dirigirse para pedir ayuda
El acoso puede adoptar muchas formas, desde la agresión física hasta la exclusión social. Es un problema importante en muchas escuelas y lugares de trabajo. También tiene consecuencias negativas para la salud mental y física de la víctima.
La mejor manera de protegerte cuando te acosan es saber qué hacer, cómo reaccionar y cómo crear un plan de escape. Asegúrate de contar con un adulto de confianza que conozca tu situación. Si el acoso no cesa después de tomar estas medidas, habla con un consejero escolar o ponte en contacto con las autoridades para pedir ayuda.
Algunas personas pueden intentar decirte que el acoso forma parte de la vida y que debes acostumbrarte a él. Pero esto no es cierto. Te mereces algo mejor que ser molestado o burlado constantemente en la escuela o el trabajo.
Si el acoso no se detiene después de intentar estos pasos, habla con un adulto que conozca tu situación para que te aconseje sobre qué más puedes hacer. El acoso no es eterno, pero si sigue ocurriendo, puede provocar problemas graves como la depresión o incluso el suicidio. (IA)
