Joffre Villalva Casanello
En el principio; nos dejamos llevar por aquellos seres que amamos y que dirigen nuestra vida, aceptando todo lo que nos toca vivir como si fuera la manera correcta de existir sin cuestionarnos muchas veces, si aquello que vivimos nos permite desarrollarnos de manera que podamos sentirnos libres, y es que lo ideal para nuestra vida se encuentra dentro de nosotros mismos como una voz interior que nos alienta en el camino y alimenta nuestros sueños.
Durante nuestra vida evaluamos los pros y los contras de nuestro paso por la vida; tratamos de acordarnos de todas aquellas personas a las que amamos y a las que dimos cariño, tratamos de estar cerca de aquellos a quienes amamos y queremos para sentirnos completos y lo ideal para nuestra vida apenas empieza a despertar dentro de nosotros como el amanecer llenándonos de esperanza.
En el camino de salida hacia el pasado de muchas personas nos acordamos de las vivencias sin sentido que desperdiciaron nuestro tiempo, de los errores cometidos cuando no escuchamos nuestra voz interior que nos alertaba de los peligros y casi sentimos el peso de la desesperanza cuando las personas más queridas tomaron otros caminos y empezaron a alejarse dejándonos en soledad.
Antes de irnos de esta experiencia vital que es el amor del CREADOR en nuestras vidas, debemos elegir el desarrollar nuestro potencial de lo ideal en nuestras vidas, de tal manera que todos los que nos rodean aprendan de nuestro paso y reciban de nosotros el ejemplo oportuno de cómo se comparte la felicidad entre la gente; de tal manera que lograremos hacer que lo ideal de nuestra vida se manifieste materialmente como un hecho práctico que beneficie a todas y a todos, entonces y solo entonces volverá a ti como la recompensa de paz y felicidad que es producto de nuestra vida, así todo lo ideal de tu vida se habrá desarrollado y representará el sentido de tu experiencia vital en este mundo y será de provecho para todos los demás.