Enemigo del pueblo

Carlos Arellano

El gobierno del presidente Guillermo Lasso se enfrenta a un enemigo político. Su hostil adversario está representado en una función del Estado cuyas características son el oportunismo y el chantaje, además, esta institución está catalogada por muchos de deshonesta y de escasa credibilidad. ¿Quién imaginaría que la Asamblea Nacional se convertiría en el gran enemigo del pueblo?

La actual Asamblea está plagada, al igual que sus antecesoras, de legisladores ineficaces, salvo honrosas excepciones. Algunos de sus integrantes están glosados por la Controlaría General del Estado, otros están acusados de solicitar diezmos o de gestionar cargos públicos, algunos son anti-derechos, otros sufren de delirios de persecución y más. ¡Qué difícil es dialogar con un Congreso de estas características!

Dicen que el pueblo tiene la Asamblea que se merece, pero me niego a aceptar que nos merezcamos esta desprestigiada institución.

A pesar del exhorto realizado por distintos sectores para que el Gobierno entable diálogos con todas las bancadas legislativas, los avances son escasos porque estos grupos han demostrado que su único afán es perjudicar los intereses del país.

Ni el reciente anuncio del presidente Lasso de convocar a una consulta popular para que la ciudadanía decida sobre temas trascendentales, les inmuta. Mientras la propuesta del ejecutivo se concreta, UNES, Pachakutik y PSC confabulan su relación de cercanía para evitar la aprobación de leyes y reformas urgentes.

El único interés de UNES es lograr la impunidad de sus líderes y coidearios. A Pachakutik le interesa gozar de una vida de lujos con fondos públicos mientras justifica a sus asambleístas de dudosa reputación. Y al PSC, lo único que le interesa es tratar de mantenerse en la escena política porque los recientes resultados electorales confirmaron que su liderazgo a nivel nacional está deteriorado.

¿Cuál es el futuro político de este país si la Asamblea continúa con su descabellado e injustificado plan de impedir que el ejecutivo concrete su plan de Gobierno? Con un enemigo de esta magnitud, difícilmente el país encontrará salidas articuladas y consensuadas a los complejos problemas que nos afectan a todos.