Ser más humanos

Adriana Ormaza Cuenca

Adriana Ormaza Cuenca

Si observamos cada uno de los reinos de la naturaleza, podemos distinguir sus propias cualidades, así las rocas nos muestran su resistencia, las plantas su vitalidad, los animales su emocionalidad, que si bien como seres humanos las compartimos cabe preguntarnos también: ¿Cuál es la cualidad propia del humano que nos hace distintos a los otros reinos de la naturaleza?

¿Existen cualidades propias de los humanos?

¿Es posible que se puedan perder estas cualidades  propias humanas? ¿Qué sucede si las perdemos? ¿Cuáles son esas cualidades humanas? ¿Qué es aquello que nos hace verdaderamente humanos?

Para encontrar la respuesta, nos ayudaría reflexionar en qué significa un acto humano y un acto inhumano.

¿Nuestras acciones diarias pueden considerarse más humanas o inhumanas? ¿Cuándo perdemos la paciencia con el otro, esto prueba qué somos más humanos o inhumanos? ¿Cuándo juzgamos o criticamos? ¿Cuándo cuidamos del orden y la limpieza?

Cuando cada día somos testigos de más actos inhumanos es sencillo ver también la necesidad de cultivar nuestra humanidad.

Aunque la filosofía suele ser confundida como un proceso intelectual y a veces incluso demasiado aburrido. Nueva Acrópolis propone un espacio para vivir la filosofía como ese proceso natural del ser humano de encontrar respuestas y vivir acorde a ellas.

Descubrir a la filosofía como un medio para lograr desarrollar el potencial humano, es decir, hacernos más humanos, reconociendo lo propio, lo que nos corresponde. Es entonces cuando la filosofía se transforma en el arte de vivir. Vivir partiendo de conocer nuestra esencia humana.

En los momentos de crisis social cabe preguntarnos: ¿Cómo contribuimos con nuestras acciones? ¿Son nuestras acciones con la familia, con los vecinos, con la naturaleza, más humanas o inhumanas?

Nueva Acrópolis Santo Domingo