Niñez desnutrida; Ecuador culposo

Cecilia Chacón

Si Ecuador se presentara a un tribunal y el caso fuese desnutrición infantil, con seguridad el veredicto sería a la reja. En la actualidad, el Gobierno Nacional da continuidad al Plan de Desnutrición crónica infantil como política de relevancia e interés multidisciplinario e interseccional. Política que hay que apoyar desde todos los frentes, pues nos encontramos a filo de navaja, es decir, en punto de inflexión para reivindicar la esperanza de vida y la calidad del proyecto de vida de las niñas y niños menores de 5 años.

Ecuador es uno de los países que arrastra a la desnutrición, la anemia, y otras afecciones prevenibles como males permanentes y Tungurahua está dentro del ‘top ten’ de la lista negra. Más claro, en el séptimo lugar con Ambato y Quero con los más altos índices. Sin embargo, me asombra que ninguna autoridad local actual o futura se pronuncie por la necesidad de un frente o estrategia común y por sumar actores estratégicos para desarmar los altos índices de la desprotección infantil.

En el país nacen 330 mil niños cada año y de ellos 23 de cada 100 se encuentran sin oportunidades. En Tungurahua, estos datos se incrementan de manera alarmante 32,5 de cada 100 niños menores de 5 años se encuentran en desnutrición crónica. Y no es solo un problema estructural o de pobreza únicamente, tiene que ver con el seguimiento de la política pública, los cambios de patrones culturales en la alimentación y en el cuidado, en la atención de los primeros 1000 días; por ello, el plan de gobierno local que no tenga énfasis en la erradicación de las violencias y la desnutrición infantil a la reja.

Los próximos Planes de Ordenamiento y Desarrollo Territorial deben generar mecanismos serios y no populistas de la erradicación a la desnutrición, caso contrario, nos encontramos frente a la reducción de las potencialidades emocionales, cognitivas, físicas, sociales; aumentando los costos de salud, reduciendo la garantía de derechos de la niñez y llevándolos a la pobreza y al subdesarrollo.