World Culture Festival

Rosalía Arteaga Serrano

Una sola voz convoca a medio millón de personas para reunirse en el gran Mall de Washington D. C. Lo más asombroso es que lo hace en nombre de la cultura y de la paz, algo que verdaderamente impacta.

Hay grupos artísticos de diversos países del mundo, todos en calidad de voluntarios, para mostrar su cultura y su vocación por la paz, y más de 17.000 artistas en escena. Líderes mundiales de prácticamente todos los rincones del planeta, representantes religiosos provenientes de diferentes credos, políticos, artistas, intelectuales, empresarios, todos unidos bajo la convocatoria de Gurudev Sri Sri Ravi Shankar, un líder espiritual de la India, creador del movimiento el Arte de Vivir.

Tuve la oportunidad, estremecida, de dar mi mensaje por la paz ante esta multitud sorprendente, una paz que la interpretó en relación a los seres humanos, pero también con relación a la naturaleza, que tan vapuleada está y nos preocupa, sobre todo por el avance del denominado cambio climático.

Todas las voces se juntaron para hablar por la paz. Un papel fundamental es el que cumplen los voluntarios, aquellos que se encargan de toda la parte logística, de la atención a los invitados, de mirar que cada detalle y punto de la agenda se cumpla con exactitud, lo que contribuye a realzar un evento de esta envergadura y naturaleza.

Pero lo más importante es el nivel de respeto y de convocatoria que ha alcanzado Ravi Shankar. Su prédica y convocatoria por la paz son impresionantes, y se debe elevar su voz en estos tiempos difíciles que vive la humanidad.

El World Culture Festival de Washington es una luz que alumbra esos espacios oscuros en los que, desafortunadamente, muchas veces tantas naciones y personas se precipitan.