El día a día nacional…

Alfonso Espín Mosquera

“No vamos a trabajar para los vacunadores”, dice dueña de bazar en Guayaquil…Hace 4 meses murió asesinada Náthaly López,  directora administrativa del Hospital Teodoro Maldonado, por no dejarse chantajear de las estructuras de corrupción…Más de 50.000 personas se sumaron al desempleo de mayo a junio en Ecuador… 31 guías penitenciarios han sido destituidos por corrupción en 2023… Guayaquil: Dos elementos de la Policía Nacional fueron asesinados… “Los tiempos para una consulta médica en cualquier parte del mundo no son de hoy para mañana, sino para tres semanas, un mes y a veces dos, tres meses”, dice el presidente del IESS…  El trámite de jubilación es un calvario, más de 3.000 causas represadas solo en Guayas y, hay que mendigar y rogar…

Las anteriores, son algunos de los titulares de noticias de la prensa nacional de estos días y así abundan las novedades sobre muertes, asaltos, corrupción, violencia, desempleo, calamidad administrativa del Estado, descontrol, sin contar con las propuestas ‘salvadoras’ de los candidatos que se despepitan por cada voto de los ecuatorianos.

La verdad es que este panorama podría asombrar a cualquier ser humano y ciertamente asustar al punto de deprimirnos por estar pasando en nuestro propio país.

El  narcotráfico y sus redes de maledicencia hacen de las suyas a lo largo y ancho del Ecuador. La violencia y el accionar de los grupos delictivos es incontrolable para quienes ejercen el poder. Mientras el gobierno anuncia algún logro sobre el crimen organizado, la delincuencia no descansa y día a día aparecen nuevos asesinatos, secuestros y más formas criminales. Con este ambiente ¿cómo invertir, estudiar o trabajar en el país? Se ha perdido la paz y nadie esta ha salvo ni dentro de sus casa, peor fuera de ella.

Quienes a nombre de soberanía expulsaron la base de Manta y ahora aparecen involucrados con dineros del narcotráfico, tienen el descaro de querer repetirse los votos del electorado, pero más culpa tienen aquellos que mirando y palpando esta crudísima realidad volverán a darles su apoyo.

No queda más que pensar en que el gran pueblo se acostumbró a los ‘bonos’, como forma paternalista de detener el trabajo digno y asegurar manifestantes para sus cometidos. Indigna ver la picardía de quienes ahora hacen campaña en favor de los políticos corruptos a sabiendas de todos los negociados y dineros mal habidos de los que son impugnados los llamados revolucionarios.

Es indignante verle a Correa siempre merlino e incapaz de responder o aclarar cualquier pregunta ante todo periodista en cualquier parte del mundo, pues solamente se limita a descalificar, reírse o enfurecerse.

Los afiliados a la Seguridad Social viven sin medicinas y los jubilados con la zozobra de que cualquier día no haya para sus pensiones ganadas por su trabajo de toda la vida. Los jóvenes sin trabajo y miles de niños sin escuela y nutrición.

Ojalá se vaya pronto este régimen inoperante y cómplice de los males diarios que por hoy  nos gobierna y ojalá, sobre todo, no regrese el que se las da de revolucionario y redentor al país que él mismo lo dejó en soletas.