Hace 25 años… en Quito aún había espacio
En 1982, la ciudad llegaba al norte hasta Cotocollao y al sur hasta Chillogallo. No existían barrios cómo La Roldós, Pisulí, al norte, ni todo lo que hoy es el sureño y populoso sector de Quitumbe.
Durante los últimos 17 años del siglo XX, la ciudad todavía era un polo de atracción para pobladores de otras provincias, que buscaban trabajo. Los hogares que existían al norte bordeaban el actual aeropuerto, pero pocos cientos de metros más allá, empezaba un Quito campestre.
En la gran mayoría del área que hoy conocemos como el norte y sur de Quito, no había más que 30 personas por hectárea; mientras que hoy, hay lugares que incluso superan los 600 habitantes por hectárea.
La ciudad creció tanto que se incorporaron parroquias que eran consideradas rurales, como Carcelén y Calderón. Estas últimas tuvieron una tasa de crecimiento de hasta el 8 por ciento anual, las más altas de la ciudad, debido al bajo costo de sus tierras.
El Quito de hoy
Quito ahora ya no crece tanto hacia los costados norte y sur, sino hacia arriba, con la construcción de edificios.
El destino migratorio también cambió. La gente ahora migra al sector rural, porque ahí está el desarrollo florícola y el nuevo aeropuerto. El sector de San Antonio de Pichincha, es actualmente uno de los que más crece porque, al igual que Calderón en su tiempo, ofrece tierras baratas.
Hacia el futuro
El futuro de la ciudad tiene limitaciones. Según la Dirección Metropolitana de Planificación Territorial, el Distrito Metropolitano (DMQ) sólo puede albergar a 4 millones de personas. La zona actualmente conocida como urbana tiene un límite de 2,7 millones de personas.
