(Foto: ar.whales.org)
Saltos en el mar, golpeteos de la cola contra el agua y cantos melodiosos forman parte del espectáculo natural.
Desde Esmeraldas hasta El Oro hay puntos específicos autorizados para zarpar mar adentro y encontrarse casi cara a cara con las ballenas jorobadas, que viajan 9.000 km de distancia desde la Antártida hacia costas ecuatorianas para aparearse o parir a sus crías.
El cortejo y apareamiento de estos grandes mamíferos marinos es un espectáculo natural que va acompañado de cantos, saltos y soplidos que levantan chorros de agua de hasta tres metros de altura y que es visto y disfrutado por turistas nacionales y extranjeros.
Los guías llevan a los visitantes en embarcaciones autorizadas y con las respectivas seguridades en el trayecto de ida y vuelta, que dura aproximadamente tres horas. Durante el recorrido informan que las ballenas viajan por aproximadamente tres meses en búsqueda de aguas cálidas y alimento, que miden entre 14 a 18 m de largo, llegan a pesar más de 30 o 40 toneladas y que permanecen en aguas ecuatorianas hasta septiembre.
Salidas autorizadas
Súa es el punto autorizado, al sur de Esmeraldas, para el zarpe de las embarcaciones de dos operadoras turísticas que cuentan con el permiso respectivo para llevar entre 10 y 15 pasajeros a un costo de 15 dólares por persona, informa Carlos Acosta, coordinador zonal 1 del Ministerio de Turismo.
Esmeraldas espera recibir mayor número de visitantes este agosto y las ballenas son un buen atractivo, dijo, al tiempo que invitó a disfrutar también de Mompiche, Tonsupa, Atacames, Same y otras playas que se encuentran listas con hospedaje, alimentación y transporte.
Mientras que en Manta (Manabí) se fijaron dos puntos de embarque: uno en el muelle flotante ubicado en el malecón de la ciudad y el segundo en el muelle pesquero artesanal, localizado en San Mateo a 15 minutos al suroeste de la ciudad.
Las autoridades de Manta consideran que este tipo de acontecimientos naturales atraen al turista y con esto se espera favorecer la reactivación económica y turística de la ciudad.
El santuario de las ballenas
Puerto López, al sur de Manabí, se ha ganado el título de ‘Santuario de ballenas’ porque a sus costas llegan, según estimaciones de especialistas, entre 400 y 600 individuos.
El director de turismo del Municipio de Puerto López, Ángel Pincay, manifestó que se encuentran ya en el “pico de la temporada de avistamiento” y que han trabajado para otorgar seguridad al visitante así como instruir a los guías y conductores de embarcaciones en relación a conservación para evitar impacto en los cetáceos.
Las embarcaciones autorizadas parten desde el muelle turístico de Puerto López y el costo es de 25 dólares por persona y de 20 dólares cuando se trata de grupos.
Asimismo, Puerto López cuenta con otros espacios turísticos como el Parque Nacional Machalilla, la isla de La Plata, área recreacional Los Frailes, el área arqueológica de Agua Blanca y el bosque húmedo para observar monos; deportes de aventura, pesca deportiva. Aquí se encuentra hospedaje desde 12 dólares y alimentación desde 3,5 en los comedores populares. (CM)
Desde la isla Santa Clara
Desde Puerto Bolívar, en El Oro, salen las embarcaciones hasta la isla Santa Clara (archipiélago de Jambelí-cantón Santa Rosa), un refugio de vida silvestre que desde 2016 recibe a los turistas para avistar las ballenas jorobadas y delfines pico de botella.
El recorrido se realiza en yates, con capacidad de hasta 40 personas, se observan las ballenas y delfines y por alrededor de 40 minutos se recorre alrededor de la isla para avistar piqueros patas azules, fragatas, leones marinos, tiburones ballenas, entre otras especies de animales.
Por seguridad
Recomendaciones
>> Las operadoras de turismo deben contar con Registro de Turismo y Licencia de Funcionamiento.
>> También deben tener una póliza de seguro para todos los pasajeros.
>> Los pasajeros, la tripulación y los guías deben utilizar chalecos salvavidas.
>> La aproximación de las embarcaciones debe iniciarse a 400 m para ballenas y 200 m delfines.
>> Durante el avistamiento se debe mantener a una distancia de 10 m con las ballenas y 50 m con los delfines.
>> Para la aproximación y alejamiento, la velocidad permitida de las embarcaciones será de 8 km por hora.
>> Si una ballena se acerca a la embarcación se deberá detener la marcha.
>> El tiempo adecuado para el avistamiento es de 25 minutos y si hay crías se reduce a 15 minutos.
>> Durante el avistamiento los pasajeros no deben ponerse de pie, ni cambiar su ubicación en la embarcación.
>> Tampoco deben lanzar desperdicios en el mar, ni realizar pesca.
(Fuente: Ministerio de Turismo)
