Con Correa, la izquierda regresa al poder en Ecuador en escenario difícil

QUITO,(AFP)
El candidato Rafael Correa, amigo del presidente Hugo Chávez, alcanzó la presidencia de Ecuador gracias a un electorado que al tiempo que rechazó a la clase política temió un triunfo del millonario Alvaro Noboa, que tendrá el control del Congreso con el que gobernará el izquierdista, estimaron analistas.

Correa «representa el rechazo de varios sectores a un sistema político considerado inepto y corrupto, pero que también tienen razones para temer a Noboa porque lo consideran muy influyente como para darle más poder», dijo a la AFP Fernando Bustamante, sociólogo y analista de la Universidad San Francisco.

La victoria del ex ministro de Economía, de 43 años, supone el ascenso de la izquierda -desde el retorno a la democracia en 1978- bajo la figura de un líder nacionalista que sueña con integrar a Ecuador a la corriente latinoamericana que lidera Chávez.

«Correa triunfó porque la gente no quería un presidente como Noboa, es decir, una especie de patrón dada su trayectoria como empresario. Antes que por el líder de Alianza País, muchos votaron contra un gobierno como el que quería su rival», opinó Patricia de La Torre, directora del Observatorio Político de la Universidad Católica.

«También existe otro sector de la población, con más conciencia, que creyó en su propuesta de construir una ciudadanía y un Estado diferente, y no la de los partidos políticos que causan desconfianza», agregó.

Correa, al proclamar su victoria este domingo, admitió que los votantes pudieron elegirlo para evitar que Noboa «concentrara más poder», y los invitó para que creyeran en un gobierno que describió como de «manos limpias y mentes lúcidas».

El catedrático Adrián Bonilla, de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), atribuyó la victoria del izquierdista al desgaste de la imagen de su oponente de derecha, que se presentaba como enviado de Dios.

«Correa logró erosionar la credibilidad de Noboa y fortalecer la suya combinando las expectativas de cambio político con las necesidades materiales de la población», estimó el experto.

Pero a Correa le espera una dura batalla en el gobierno por la oposición del Congreso que controlará el partido de Noboa, lo que avizora un duro enfrentamiento en torno a su propuesta de convocar una Asamblea Constituyente a espaldas del Legislativo, coincidieron los observadores.

«Será un mandato difícil porque no tendrá ningún apoyo del Parlamento y eso le va a crear un gravísimo problema de gobernabilidad, por lo que tendrá que considerar abrir diálogos con sectores que no le ofrecieron apoyo», indicó Bustamente, al recordar que Correa no presentó candidatos al Congreso el 15 de octubre.

Asimismo, «tendrá que dar cumplimiento a su propuesta de Asamblea porque si no el pueblo se levantará como ha hecho en otras ocasiones», afirmó de la Torre.

«El panorama de Correa no es fácil, la gestión va a estar en un clima político y social muy conflictivo», agregó.

En la última década Ecuador eligió a tres presidentes que no pudieron culminar su mandato y fueron destituidos por el Congreso en medio de revueltas populares.