Ayude a su niño a sacar sus emociones cuando estudia

SITUACIÓN. Los niños pueden demostrar sus emociones en sus comportamientos diarios.

Para todos, la llegada de la pandemia ha representado un cambio drástico en todos los aspectos desde el confinamiento hasta la realización de actividades que cada miembro de la familia tiene, ya sea en la casa, el trabajo o tareas de la escuela,

Sin embargo, en el caso de los adultos están más conscientes de manejar o no sus emociones, no así con los más pequeños, los escolares.

Los niños necesitan respuestas sinceras y desarrollar capacidades de afrontamiento ante la nueva realidad. Es vital escuchar sus preocupaciones y consolarlos, darles afecto y asegurarles que están seguros en casa.

Además, siempre que sea posible, debe crearse oportunidades para jueguen y se relajen, mantener sus rutinas y horarios regulares, especialmente antes de que se vayan a dormir.

Para Elizabeth Segarra, docente de primer año de básica, trabajar en esta nueva modalidad es compleja por la pérdida de cercanía con los más pequeños.

“Cuando uno está en el aula puede identificar con mayor facilidad las destrezas, los problemas de aprendizaje y las personalidades de los niños” aseguró.

Sin embargo, en este momento eso pasa a segundo plano no porque no tenga importancia sino porque hay que cumplir un cronograma de estudios .y hace que esas observaciones se anulen, recalcó Segarra

Pese a ello, la experta recomienda a los padres de familia tomarse un tiempo para descubrir las emociones que guardan los niños al no poder salir, jugar en lugares lo más abiertos para tener contacto directo y o identificar las reacciones ante las tareas o clases virtuales.

Ella habla de la frustración que pueden sentir los niños al momento de realizar tareas que no son dirigidas personalmente pues, aunque los padres o encargados estén junto a ellos, la metodología de enseñanza no tiene técnica en muchos casos.

El llanto, la falta de apetito y la resistencia son situaciones recurrentes en los pequeños y deben dejar que salgan a flote pues al ser emocionales lo más correcto es dejarles sentir dice Segarra.

Según una guía creada por el Ministerio de Educación sobre contención emocional para las familias en tiempos de crisis, es importante que los padres de familia conozcan en sus hijos los impactos que  ha generado en ellas y en ellos, y ser conscientes que hay que apoyarlos no reprimirlos ni castigarlos si sale alguna emoción.  Algunos de esos impactos pueden convertirse en verdaderas amenazas y perjudicarles en su desarrollo. Es lo que los especialistas llaman factores de riesgo.

La actividad participativa en casa es una probabilidad de manejar de mejor manera las situaciones y para eso hay talleres lúdicos y recreativos que pueden realizarse en familia para detectar cualquier situación que pueda afectar y buscar ayuda inclusive profesional si no sabe como manejar la situación. (CNS)

A continuación ejercicios antes de las tareas :

-Respiración profunda durante unos tres minutos entre padres e hijos

-Simular que se juega con una pelota imaginaria para ‘romper el hielo’

-Identificar emociones preguntando a cada integrante de la familia cómo se siente y porqué

-Fijar un objetivo por día como el abrazo, una palabra o un gesto que los ayude a relacionarse entre sí.