Menores de edad acuden a La Floreana Dos para consumir licor

Menores de edad se reúnen en La Floreana dos a consumir licor artesanal.
Vicio. Menores de edad se reúnen en La Floreana dos a consumir licor artesanal.

Los menores de edad aprovechan que esta calle es poco concurrida y que no tiene salida para reunirse a consumir licor.

Grupos de adolescentes con uniformes de instituciones educativas de Ambato acuden a La Floreana Dos para consumir alcohol aprovechando que esta calle no tiene salida y que poca gente transita por la zona.

Moradores del sector ven con preocupación el accionar de los menores de edad, quienes acuden en las mañanas con pequeñas botellas llenas de licor artesanal.

Las mismas tiendas cercanas son las encargadas de proporcionar el alcohol en botellas de refresco y hasta en fundas por un dólar o menos.

 

 

Quejas

Una de las moradoras del sector, quien prefirió mantener su nombre en reserva por temor a represalias, contó que en más de una ocasión pudo ver a las propietarias de las tiendas cercanas vendiendo licor a los estudiantes.

De igual manera indicó que los viernes es el día que más adolescentes llegan al sector a consumir licor después de la jornada educativa.

“Es horrible verlos tomando y con los uniformes puestos, hay chicos que no llegan ni a los 18 años y ya están en el vicio”, contó la mujer, quien lleva viviendo en el sector más de 30 años.

 

EL DATO
En el lugar se venden licor artesanal por un dólar y 50 centavos.

 

La vecina dijo que en varias viviendas de La Floreana se almacenan canecas de puro que se vende todos los días y a toda hora.

María Villacrés, comerciante de los cubículos ubicados en el sector, menciona que personas sin hogar también llegan al sector a consumir licor, incluso a dormir en las jardineras que conducen a esta calle con la calle 13 de Abril.

“Hay personas que viven ahí varios días y luego se van, dejan todo lleno de basura y nadie se preocupa por limpiar”, contó.

Camilo López, transeúnte, dijo que prefiere no pasar por la zona porque siempre hay personas alcoholizadas en las escalinatas, lo cual le genera una gran percepción de inseguridad.

“En la noche si hay robos aquí, los borrachos de la plaza Urbina son los que se quedan dormidos en las veredas”, mencionó el ciudadano.

 

 

Alcohol

El consumo de alcohol es una de las conductas de riesgo más frecuentes entre los adolescentes. Representa un riesgo por sí mismo y por los problemas asociados que plantea, como, por ejemplo, accidentes de tráfico, sexo sin protección, violencia, dificultades académicas y adicción en la vida adulta.

Expertos aseguran que los menores de edad que presentan episodios repetidos de consumo excesivo tienen más riesgo de tener problemas con el alcohol durante la juventud y cuando sean adultos.

Los adolescentes son menos sensibles a los efectos sedantes y a los trastornos motores que produce el alcohol, lo que limita su percepción de riesgo ante el consumo de licor y da lugar a mayores síntomas de excitación y menores de sedación en caso de embriaguez. (RMC)