Cada vez hay más irregularidades en la prueba ‘Transformar’

Al menos 950 estudiantes no se presentaron a la prueba, según la Senescyt.
Evaluación. Al menos 950 estudiantes no se presentaron a la prueba, según la Senescyt.

El ingreso a la educación superior sigue siendo un ‘dolor de cabeza’ para cientos de jóvenes que, año tras año, tratan de continuar sus estudios en una universidad.

El objetivo se vuelve más complicado de cumplir, sobre todo por las irregularidades, corrupción y fraude que se denuncian en lo que tiene que ver con la prueba ‘Transformar’.

Los postulantes aseguran que, incluso desde que se arrancó con la toma de un examen para la asignación de cupos en 2012, se presentaron estos inconvenientes.

 

Cuestionamientos

Desde hackers que podrían acceder a las preguntas del examen, controles remotos instalados en las computadoras de los estudiantes, hasta el servicio personalizado para rendir la prueba en lugar del postulante, son algunas de las modalidades de fraude que se han detectado en este proceso.

En la actualidad con la prueba Transformar el panorama no ha cambiado, así lo siente Elena de 21 años, quien ha rendido ya cuatro veces el examen en diferentes años y no ha logrado obtener un puntaje que le permita optar por una carrera universitaria.

“Cada vez el puntaje es más alto y aunque uno se esfuerce no se puede”, dijo al asegurar que conoce que una amiga logró un puntaje alto, pero gastó cerca de 400 dólares para que den la prueba por ella.

 

TOME NOTA 
Según la Senescyt 1.880 aspirantes a la educación superior 
finalizaron la evaluación; mientras que, 953 personas no se 
presentaron.

 

Realidad

Son incontables las ofertas de ‘ayuda’ que se publican en redes sociales para rendir el examen ‘Transformar’.

Anuncios como asesoría personalizada para rendir el examen, ayuda en las pruebas, banco de preguntas filtradas, entre otros, se viralizaron en redes sociales.

En Ambato, desde los mismos ‘beneficiarios’ se dio a conocer que llegaron cuatro personas, supuestos expertos en las áreas básicas que conforman la prueba, y fueron quienes desarrollaron conjuntamente el examen.

La modalidad sería que estos ‘expertos’ eran llevados a las casas de los aspirantes y luego de rendir la prueba los recogían en un bus como si se tratara de un emprendimiento, donde toda la logística estaba cuidadosamente organizada.

 

EL DATO
Este 29 de marzo de 2022 rindieron la prueba Transformar.

 

Según los ciudadanos, esta es una realidad que lamentablemente se vive, pero no se atreven a denunciar porque también se han beneficiado de estas irregularidades.

Para Patricia Villacís, docente universitaria, esta situación es evidente y tiene varias aristas, pero nace de una sola realidad que es la imperiosa necesidad de ingresar a la universidad, empujando a toda la comunidad educativa a involucrarse en estos actos irregulares.

Según la docente, el inconveniente radica no solo en el proceso de evaluación que no se ajusta a la realidad, sino también a la falta de cupos y de universidades eficientes, pues cada año son más de 300 mil estudiantes que buscan ingresar a la universidad, pero apenas existen 120 mil cupos.

 

TOME NOTA 
Cada año son más de 300 mil estudiantes que buscan ingresar 
a la universidad, pero apenas existen 120 mil cupos.

 

Análisis

Carlos Zurita, director de Quality UP, manifestó que hoy la prueba ‘Transformar’ es virtual pero no tiene ningún instrumento de control.

Esto da vía libre para que se pueda suplantar, incluso al estudiante que está rindiendo el examen, en fin, un sinnúmero de posibilidades para hacer trampa al momento de rendir la prueba.

Aseguró que el ingresar con fraude o irregularidad es solo uno de los problemas, pues cada vez más ciudadanos se dan cuenta de esta realidad y hay cada vez menos personas que lo hacen de manera honesta.

“Es súper crítico porque se está quitando el cupo de personas que sí deberían haber entrado”, dijo al mencionar que como padres y como sociedad se está dando el mensaje de que se tiene lograr un cupo sin importar lo que se tenga que hacer.

Esto es compartido por el sociólogo Jorge Vásquez, quien señala que el buscar estas argucias para tener un buen puntaje, se cobija bajo la ideología de que “el fin justifica los medios”.

“Estamos creando una sociedad en la que se normaliza la trampa, la corrupción, el engaño y si los mismos padres somos quienes enseñamos esto, es imposible que luego podamos pedir rectitud en la vida estudiantil, profesional y hasta personal de nuestros hijos”, puntualizó.

Añadió que el Gobierno debe, de manera urgente, tomar los correctivos del caso de ingreso a la universidad, para que dejen de, aunque sea de manera indirecta, promoverse estas prácticas antiéticas. (FCT)