Santo Domingo: Kasama, el nuevo amanecer en los tsáchilas

Kasama, el nuevo amanecer  en los tsáchilas
VESTIMENTA. Los hombres llevan un vestido sencillo y ligero denominado ‘palompoé’.

La unión familiar y el apego a lo sagrado es el detonante de esta gala compartida en comunidad.

Se trata de una fiesta celebrada por los miembros de la comunidad tsáchila. En el idioma tsafiqui, utilizado por este grupo étnico, ‘Casa’ significa nuevo y ‘ma’ quiere decir día, por ende hace alusión al inicio de un nuevo día o nuevo año.


Tradicionalmente, este evento se constituye en una gran reunión a la que asisten todos los miembros de las diversas comunas tsáchilas para reencontrase con sus raíces, saludar a su familia, intercambiar sentimientos de prosperidad y amistad y compartir la alegría del nuevo periodo.


Mediante esta se marca el inicio de un nuevo año y es realizada los jueves y viernes de Semana Santa (ceremonia católica de gran acogida en el país).

La algarabía es el sello del evento


En la antigüedad, esta celebración era aprovechada para realizar el pedido de la mano de una joven, mientras los marimberos deleitaban a los presentes con su música y se tomaban bebidas especiales. Ahora se realizan presentaciones de danza, teatro, música y concursos autóctonos de la nacionalidad, existen también demostraciones de habilidades en caza y pesca.


Una de las características sobresalientes de la reunión es la cacería de sahinos y guantas y la pesca de bocachicos y guañas por parte de los priostes de la fiesta. En esta actividad participaban los hombres cabezas de hogar, mientras que sus esposas se dedicaban a cosechar frutas, preparar la chicha y la comida para compartir.

Identidad
Más por conocer

° En los tsáchilas, el ‘mu’ o achiote da la coloración roja que usa casi exclusivamente el varón: El ‘mali’ o ‘huito’, pepa semejante al aguacate, da el matiz negro azulado, así como el verde claro que usan las mujeres.

° El tocado del cabello es muy original. Se lo coloca con una pasta preparada a base de leche de sandí y achiote, que convierte al pelo en un visera consistente; a esto lo llaman ‘embijamiento’. Las mujeres llevan el pelo suelto a las espaldas; cuando van al pueblo lo adornan con peinetas, vinchas y cintas.

Kasama, el nuevo amanecer  en los tsáchilas
COMIDA. Los mayones son una de sus especialidades culinarias más populares.

La comida festiva


El Atlas Alimentario de los Pueblos Indígenas y Afrodescendientes del Ecuador menciona que el plato propio del Kasama es el ‘mele lukupi’, un caldo con saíno ahumado y plátano verde rallado. En el pasado, este animal se encontraba en la región, pero en la actualidad se ha extinguido. Por esta razón, ahora son abastecidos por comerciantes procedentes de la Amazonía o de la selva de Esmeraldas.


También se come guaña, un pescado que puede ser preparado en sopa, ahumado o incluso en tamal. Además, se disfruta del mayón o gusano de chonta, acompañado de ‘pa ka de pescado’ y chicha de maíz’. (MLY)

Ritos religiosos


° Hoy en día, el Kasama está fusionado con la Semana Santa. Los jueves y viernes santos es común hacer procesiones y está prohibido comer carne roja. El sábado santo, en horas de la mañana, se llevan a cabo actividades de purificación a cargo de los ‘pone’, más conocidos como shamanes. Luego se presentan los bailes tradicionales acompañados de los representantes de otras nacionalidades.


En ocasiones, hay familias que preparan alimentos para vender, pero contrasta drásticamente con el objetivo ancestral de esta celebración, puesto que la comida era compartida con el resto de invitados, de ahí la tradición de la cacería y la pesca.

Detalles
Colores que los identifican

° Los tsáchilas acostumbran a pintarse tanto la cara como su cuerpo en eventos especiales. A este proceso se lo denomina ‘maliquedé’. La pintura del cuerpo (pecho, brazos, y piernas) se conoce como ‘pucalé quedé’ y la del rostro es llamada ‘caforó quedé’.

° Las pinturas faciales de la mujer son más complicadas que las del varón. Las líneas son finas acompañadas de ligeros puntos en los bordes, de modo que cuando se juntan las miradas, a cierta distancia de divisan como una ilustración semejante a un cienpiés.

° El color depende del gusto, la edad y el carácter de cada persona, aunque casi siempre las líneas son sencillas y se trenzan horizontalmente. Los tonos se alternan armónicamente, las líneas plasmadas en el rostro son delgadas, a diferencia de las del cuerpo que son mucho más anchas.

El dato

Hoy en día, los tsáchilas se componen por siete comunas que se encuentran ubicadas en el cantón Santo Domingo: Chigüilpe, Otongo Mapalí, Peripa, Poste, Búa, Congoja y Naranjos.