La Casa de Cultura en el 2008 pasó a ser núcleo, desde entonces se trabaja por alcanzar varios objetivos.
La lucha ha sido constante para que las autoridades visibilicen a la cultura no solo a nivel provincial, sino nacional. En Santo Domingo, desde 1995 que nació la extensión de la Casa de la Cultura se ha trabajado en diferentes periodos para cumplir con los objetivos trazados.
La creación de la provincia Santo Domingo de los Tsáchilas, en el 2007, ayudó para que se forme el núcleo provincial y lleguen recursos del Estado. Eiron Álava, director provincial de la institución, indicó que estos 16 años han sido muy beneficiosos en el campo intelectual intangible, pero en lo tangible falta mucho por hacer.
Dijo que con la nueva jerarquía se empezó a trabajar fortaleciendo diferentes grupos culturales en el desarrollo de las capacidades artísticas, como teatro, danza y música, con lo que se hace presencia en la provincia.
Aunque reconoce que los recursos para la cultura son limitados. “Se está luchando para que se aumente el presupuesto y no nos quiten. No obstante, se trabaja con los padres de familias para que la contraparte de los niños y jóvenes que se preparan en la institución sean las presentaciones”, expresó.
A su criterio, la cultura ha pasado por tres generaciones, la primera de personas que fueron autodidactas; la segunda, los que aprendieron de ellos: y la tercera donde se ve que los jóvenes buscan formarse, estudiando en universidades de las Artes, como en Guayaquil y Cuenca. “Esto hace que el producto artístico cultural se eleve”.
Inicios
Álava recordó que en 1995 se empezó el trámite para la creación de la Casa de la Cultura, en febrero de 1996 se elevó a la jerarquía de extensión y se trabajó con autogestión, siendo Pedro Navarrete el primer presidente.
En 1997 se inició un proceso a través de un convenio con el Municipio, para contar con un lugar para la cultura, pero se perdió por falta de recursos.
El 11 de octubre de 2008 pasaron a núcleo, bajo la administración de Luis Carvajal, estuvieron en varios espacios e incluso se habló del complejo cultural, pero no se concretó.
Luego, Graciela Torres, como presidenta, gestionó en la administración municipal y consiguió aproximadamente tres hectáreas para construir la sede, pero había una cláusula donde se decía que, si no se ejecutaba en dos años, el 60% de la infraestructura se revertía al Municipio.
“En ese entonces sucedieron algunas situaciones, entre ellas, el terremoto del 2016 y cuando hay una catástrofe en el país el presupuesto que primero recortan es a la cultura y, actualmente, estamos padeciendo esa situación, por la inseguridad y la llegada del fenómeno El Niño”, especificó.
EL DATO A través de una planificación se organizan encuentros culturales.
Aporte
Desde el 2019, a través de un comodato, el Municipio entregó al núcleo provincial la planta baja de la exescuela 9 de Octubre, donde de a poco se ha ido adecuando diferentes áreas. Con el aporte económico de una ONG, se está ultimando detalles del Museo-biblioteca, salones de música y danza, así como del teatro.
Manifestó Álava que la obra gris es con el presupuesto de la institución a través de un proyecto y el apoyo de mingas comunitarias.
En la institución se brindan talleres permanentes de danza, teatro, música y canto, con varias jornadas y para todas las edades.
Cuentan con el museo-biblioteca donde irán las primeras 50 fotos de la historia de Santo Domingo. También ofrecen a la ciudadanía cultura a través de una galería, ubicada en el edificio de la dirección provincial del MTOP. (DLH)
EN CIFRA 666 gestores culturales son miembros de la Casa de la Cultura en la provincia.