El SNAI prevé invertir recursos económicos en el equipamiento tecnológico.
“Cómo entran las armas, si cuando uno va de visita nos quieren sacar el útero”. Ese fue el cuestionamiento replicado por la pariente de un privado de libertad que murió decapitado durante el amotinamiento del 9 de mayo, en el Centro de Rehabilitación Social (CRS) Bellavista, en Santo Domingo.
La crisis carcelaria demostró que los reos tenían su propio ‘rastrillo’ en el interior de los pabellones, problema que no ocurre únicamente en Santo Domingo sino en todo el país.
¿Corrupción?
Gloria S., radica en la provincia de Chimborazo y uno de sus hijos está recluido en el CRS Bellavista. Ella cree que el personal encargado de la seguridad violenta las normas éticas, “los guías meten las armas para que se maten adentro”.
“También son asesinos, porque ellos se prestan para meter las armas con las que matan a mucha gente inocente”, dijo la hermana de uno de los fallecidos, en referencia a los custodios de vigilancia.
La mayoría prefiere mantener sus identidades en el anonimato para evitarse problemas mayores, pero aseguran que en los filtros todo tiene una tarifa.
“Por una comida se paga entre 10 o 15 dólares, por pasar un licor 50 dólares. 400 dólares cobran los guías por un teléfono, esa es la corrupción”, expresó una mujer.
Armas
No se descarta que estos artículos primero sean escondidos en la maleza que existe a los alrededores del centro carcelario y que los metan al mínimo descuido, pues, en algunas ocasiones han hecho hallazgos cerca al cerramiento.
Respuestas
Pablo Ramírez, director del Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y Adolescentes Infractores (SNAI), explicó que invertirán recursos económicos para instalar tecnología en los centros carcelarios del país.
Aceptó que actualmente el personal de seguridad es chequeado de manera física. Sin embargo, en las siguientes semanas colocarán sensores, inhibidores anti drones y de señal telefónica, sobre todo para evitar extorsiones desde el interior de la cárcel.
“Somos firmes en la lucha en contra de la corrupción, por eso hemos generado varios procesos administrativos. Hemos puesto a órdenes de las autoridades competentes no solo a agentes penitenciarios sino también a funcionarios administrativos, pero lamentablemente esos procesos no han seguido su curso correspondiente y estas personas han tenido que regresar”, dijo el funcionario a través de su equipo de comunicación. (JD)