Cada año, la elección de la reina de Santo Domingo es una expectativa. En este 2017, a más de escoger a la nueva soberana del cantón, en la pasarela estuvieron presentes y radiantes, exreinas, de diferentes años, no todas pudieron acudir pero un gran número estuvo presente, deslumbrando y adornando la gran noche, en homenaje a las Bodas de Oro de Santo Domingo.
Llovió la noche de su reinado
Sonia Vera García fue reina en 1979-1980, comenta que los reinados en aquella época no eran como ahora, las candidatas tenían menos tiempo para prepararse. La presentación se realizó en el Recinto Ferial, en tres trajes. Entre risas recuerda que el techo no estaba completo, esa noche llovió y las candidatas se mojaron, arruinando un poco su maquillaje, pero para ella fue una gran experiencia porque a la gente no le importó la lluvia y siguió la euforia. En aquella época existía el Instituto de Protección Social, representado por José Jervis Vicuña, con quien trabajaron en el ancianato Santa
Ana y San Joaquín, en su reinado se colocó la primera piedra para su construcción, por ello hay una placa con su nombre en el lugar. Actualmente Sonia está casada con Luis Núñez y juntos procrearon tres hijos. Es la administradora de la radio Flama Plus. Recuerda cómo era Santo Domingo en su reinado, con calles llenas de lodo, ahora dice que su deseo es verla convertida en una gran ciudad, con la mejor infraestructura, servicios básicos y sobretodo con la universidad que tanto se anhela.
La reina tenía oficina propia
Viendo la fotografía de 1981 cuando Estela Cornejo fue reina de Santo Domingo, se observa la diferencia a los reinados actuales. Estela representó en aquel entonces al colegio Santo Domingo, recuerda que la impulsaron sus compañeras y con emoción relata cómo los estudiantes se volcaron aquella noche para apoyarla. Ella ya había sido también reina de la cooperativa de vivienda Liberación Popular y Señorita Deportes. Relata que el papel de la reina era de tal importancia que ella tenía una oficina para coordinar las acciones de las labores que iba a hacer, también hay una placa con su nombre en el ancianato Santa Ana y San Joaquín, por su labor. Para Estela, ser reina le abrió muchas puertas para algo a lo que se dedica hasta la actualidad, la labor social. Luego de ser reina se casó con Byron Grijalva con quien tiene tres hijos y son empresarios avícolas.
Su hija Fiama Grijalva también concursó para reina, quedando como Virreina. Estela recuerda a Monseñor Stehle, comenta que él como un juego de palabras le decía “Yo Stehle, tú Estela”. Sobre el obsequio que ahora se le da a la reina, el carro, en su periodo los regalos que tenían eran vajillas o televisores. Tiene gratos recuerdos de su experiencia en certámenes de belleza y dice que aún hay muchas personas que la saludan y le dicen “reinita”.
Reinar en los corazones de las personas
Mirian Polanco fue reina de Santo Domingo en 1973-1974. Su padre el Mayor Hólger Polanco, primer jefe de la Policía y reconocido personaje, fue quien le dio la noticia, incentivándola a que iba a trabajar por esta tierra. Mirian representó al Cuerpo de Bomberos. Para Mirian, fue una gran decisión de su padre porque ser reina le ayudó, primero a crecer como persona y a trabajar por Santo Domingo, una ciudad en crecimiento. Además de pequeñas actividades, en su periodo Miriam pudo recolectar 60 mil sucres, con lo que se construyó el monumento que está en el Parque de la Madre, en 1973, lo hizo a través de las donaciones de los ciudadanos en una maratón efectuada. Luego de ser reina culminó el colegio y fue a estudiar en la universidad Católica de Quito, siendo una de las graduadas de la primera promoción de Ingeniería Comercial. Conoció al Dr. Fabián Mancheno Villacreces con quien se casó y procreó tres hijos. Enviudó hace 16 años y luego de varios cargos directivos actualmente es docente a tiempo completo en la universidad Católica de Santo Domingo. Mirian cree que ser reina es algo más que decoración, es servir a Santo Domingo y se alegra de haberlo hecho en su época. (VG)
EL DATO
Cada exreina tiene una experiencia diferente de su periodo como soberana.