Té y café para impulsar la lectura y la escritura creativa

Temática. Poemas o microcuentos se leen durante el micrófono abierto. (Foto: Tres Gatos)
Temática. Poemas o microcuentos se leen durante el micrófono abierto. (Foto: Tres Gatos)

Son las siete de la noche de un martes. David Zamora, de 24 años, tiene un libro entre las manos. Aunque lo ha leído varias veces, se siente nervioso. Es la primera vez que compartirá uno de sus fragmentos en público.

Él, junto a tres amigos más, se encuentra en la Cafetería- Librería Tres Gatos que, desde hace ocho meses, lleva a cabo la actividad de micrófono abierto.
Daniel Acosta, administrador y uno de los propietarios del sitio ubicado en la Mariscal Foch y Andrés Xaura, comenta que las personas que están detrás de estos proyectos tienen un gran cariño por la literatura.

“Queremos, desde nuestro espacio, proponer una actividad distinta. La ciudad tiene muchos cafés, tiene muchas librerías, pero pocos espacios como para vivir la cultura y hacer de la cultura algo vivo, algo que no sea solamente vinculado con el tema del comercio sino tomarte un café y hacer una charla colectiva larga sobre libros, sobre los autores que te gustan o sobre lo que estás escribiendo”, comenta Acosta.

Cuando la gente llega a la cafetería, Daniel anota los nombres de quienes se animan a leer. Después, toma el micrófono y resalta que pasar adelante tiene un lado placentero, “porque te abres a la gente y te dejas ver”.

“Siempre digo que es lindo que te aplaudan por leer algo que escribió alguien más”, dice el joven que inaugura la velada. Cuando pronuncia las últimas líneas, los aplausos de los demás asistentes se mezclan con el sonido de la licuadora que prepara algunas bebidas frías. Algunos prefieren vino, otros toman café.

El segundo en darle voz a los textos es el autor del libro ‘Lo que no existe’, René Espinoza. Él señala que hay un momento en el que los lectores buscan estar dentro de las páginas y se convierten en escritores.

Su intervención termina, los aplausos vuelven, la licuadora suena también.
La primera ronda del micrófono abierto termina mientras empieza un intermedio de música en vivo.

La esencia del té

En Literato Club del Té el tercer jueves de cada mes está dedicado al micrófono abierto. Una de las condiciones es que las personas lean textos de su propia autoría.

TOME NOTA
Entérese de más actividades
en el Facebook de:
Tres Gatos Cafetería Librería: @TresGatosCafe
Literato Club del Té: @literatoclubdelte
Café En-señas: @cafeensMónica Páez, administradora del lugar, recuerda que esta actividad la realizan desde abril de 2017.

“Fuimos los primeros que hicimos el micrófono abierto y nos ha ido súper bien, la gente respondió de buena manera. Ahora creo que hay dos lugares más, pero igual somos muy pocos”.

El espacio ubicado en la Floresta (Mallorca N24-282 entre Guipúzcoa y Coruña) vincula la cultura del té con la literatura.

Mónica afirma que, sobre todo en las sociedades orientales, esta bebida caliente acompañaba prácticas de filosofía, escritura y poesía. “Ahora más bien, asocian a la literatura con el café. Nosotros queríamos volver a ese pasado”, agrega.

Tanto Daniel como Mónica opinan que el hábito de la lectura permite que la gente se exprese a través de la composición de versos.

Es por eso que promueven actividades que despierten la creatividad de sus asistentes.

En Literato Club del Té se han realizado talleres de escritura creativa. Los productos finales se presentaron durante el micrófono abierto. Mientras que en los Tres Gatos se realizó un concurso de dibujo en vivo, con la temática ‘felinos en la literatura’.

Aunque hay una prevalencia de público de entre 20 y 35 años, la asistencia es diversa. “Incluso suelen venir abuelitos con sus nietos”, confirma Mónica, quien comenta que están trabajando en reforzar un espacio dedicado a la lectura de cuentos, lo que permitirá adentrar al mundo de los libros a los más pequeños.

Compartir. Taller de escritura creativa en Literato Club del Té.
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Una forma de relajarse

“Quiero hacer contigo todo lo que la poesía aún no ha escrito”, recita una joven extranjera.

La velada está por terminar y es el turno de David quien sujeta aún con más fuerza su libro. Al tomar el micrófono, lee de forma fluida un corto relato y vuelve a sentarse.

El micrófono abierto es una posibilidad de recomendar libros e intercambiar textos que uno hace, tal vez si no los lees en estos espacios se van a quedar en una gaveta o en un cajón”. Daniel Acosta, administrador Cafetería Librería Tres Gatos.
La experiencia, dice el joven estudiante de sicología, fue enriquecedora.

“Creo que necesariamente debería haber más espacios así para que la gente pueda salir un poquito de su vida cotidiana y más que todo dar paso a su inteligencia creativa y venir a compartir algo que te has guardado contigo y ahora quieres dárselo a un público”.

Lucía López, quien grabó la intervención de David, califica estas actividades como relajantes. “No tienes la típica bulla de una discoteca o de un bar común.

Es bastante interesante tomar café o té mientras compartes el arte, que la verdad no es apreciado”.(AVV)

Café en señas
fomenta la
cultura sorda

En este lugar, el movimiento de las manos reemplaza a la voz. Se trata del Café en señas, ubicado en la calle Wilson E10-30, entre 12 de octubre y Tamayo, que todos los miércoles a las 17:30 les permite a sus visitantes practicar y aprender la lengua de señas mediante juegos.

EL DATO
Conversatorios, exposiciones y más también se realizan en estos lugares.
Sin embargo, todos los días, quienes llegan a este espacio pueden aprender a comunicarse de esta manera ya que el menú también está escrito en señas y las personas que atienden direccionan a los interesados en aprender.

Son dos culturas, la de los oyentes y no oyentes, las que se compaginan en este espacio inclusivo.