Casas que colindan con estaciones del Metro de Quito, tiemblan

Rajaduras. Las casas que están junto a las estaciones del Metro de Quito, como es el caso de la Cardenal de La Torre y Tola Colonial, presentan cuarteamientos.
Rajaduras. Las casas que están junto a las estaciones del Metro de Quito, como es el caso de la Cardenal de La Torre y Tola Colonial, presentan cuarteamientos.

Las viviendas de La Alameda registran este problema. Negocios denuncian baja de ventas.

En seis de las 15 estaciones de la línea Uno del Metro de Quito se ha concluido con la obra civil, pero la maquinaria pesada continúa operando y según cuentan los vecinos, las casas tiemblan durante todo el día. La construcción de las bóvedas en la Av. Cardenal de la Torre y La Tola Colonial ha generado fricciones que han terminado afectado a las viviendas, principalmente a las construidas con barro.

Mónica Villarreal es una de las afectadas. Ella tiene su casa junto a la estación Cardenal de la Torre, en el sur de Quito. Asegura que la edificación de cemento armado presenta cuarteamientos a consecuencia de la operación de la maquinaria. Ella notificó de los daños de las paredes y cubierta a las autoridades del Metro de Quito.

La dama comentó que técnicos responsables de la construcción de la estación acudieron a su casa e hicieron tomas de las deformaciones que han sufrido las paredes y que no es el único caso en el sector.

También habló de la afectación económica que están sufriendo los dueños de los negocios, pues afirmó que hay casos en los que se cerraron porque quebraron, como fue el caso de una sastrería. Pero también hay tiendas de víveres que han corrido con la misma suerte, porque no hay ventas y, en consecuencia, no pueden cubrir los costos de arriendos.

Jorge Yáñez, gerente de infraestructura del Metro de Quito, informó que se han comprometido a revisar las viviendas afectadas para comprobar si la vibración ocasionó las rajaduras y poder resarcir el problema.

Una similar situación

A lo largo de la Av. Gran Colombia y en la Tola Colonial se ha detectado un similar problema en los inmuebles. Los arrendatarios de los locales no dudan en indicar las rajaduras de las paredes y aseguran que durante el día y la noche el ruido de la maquinaria les molesta.

EL DATO
Según las autoridades, las tres tuneladoras que construyen la línea Uno del Metro de Quito están en operación y que la obra tiene un 34% de avance. Al ingresar a una de las viviendas del sector, construida con barro, se pudo evidenciar están cuarteadas, principalmente en el segundo piso, entre las columnas y las vigas de los tumbados.

Pedro Gavilanes ha dejado de pagar los 600 dólares de arriendo porque no tiene ventas. Es dueño de un pequeño restaurante. De 400 dólares que obtenía de utilidad diariamente, ahora lo máximo que alcanza son 50.

En los acercamientos que ha tenido con los constructores de la obra le han manifestado que después vendrán los beneficios, que el colindar con una de las estaciones del Metro de Quito tiene sus ventajas.

Ahora lo que más le preocupa es la inseguridad. Pese a las luminarias que se han colocado, asegura que los delincuentes asaltan a las personas que en la noche se animan a caminar por el corredor provisional. (PSD)