El control de la Penitenciaría se ejecutó con toda la fuerza estatal

Control. Por medio de drones, el SNAI vigila las cárceles del país.
Control. Por medio de drones, el SNAI vigila las cárceles del país.

El motín, de cuatro días, finalizó con 31 asesinados y un “contagio” de la violencia. Una megaoperación, con ayuda internacional, apagó la llama.

La última vez que hubo una matanza en las cárceles del país fue en abril de 2023. Entonces, hubo 12 víctimas mortales. Tres meses después, y tras los anuncios de control y relativa calma por parte de las autoridades ecuatorianas, la Penitenciaría del Litoral volvió a ser el centro de la violencia, lo que dejó 31 presos asesinados y 11 heridos, entre ellos un militar y un policía.

El caos, sin embargo, no se quedó en la cárcel que alberga 5.300 presos y que es la más conflictiva del país; sino que propició lo que el Gobierno denominó “efecto contagio”. Es así que en otras cárceles se secuestró a más de 100 guías penitenciarios, se levantaron huelgas de hambre. En Esmeraldas hubo episodios de violencia dentro y fuera de la cárcel.

Presos mejor armados

El Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI), determinó que los enfrentamientos se deben a una ruptura de alianzas entre Lobos (pabellón 9) y Tiguerones (pabellón 8), en junio de 2023.

En el decreto de estado de excepción, el SNAI detalla que los reos tienen mejor armamento que los guías. Aunque, ya existen planes para adquirir armas letales y no letales.

Para el control de esa cárcel debieron participar los grupos especializados de las Fuerzas Armadas, Policía Nacional, seguridad penitenciaria, con ayuda extranjera.

Unidades tácticas internacionales

Previo a este amotinamiento, Guillermo Rodríguez, director del SNAI, en conversación con LA HORA, señaló que trabajan en fortalecer las capacidades institucionales como parte de los ejes de trabajo para “generar sostenibilidad en el sistema penitenciario”.

 Rodríguez dijo que a su ingreso marcó una hoja de ruta para llegar al control carcelario. Esto se enfoca en el control, recuperación, y sostenimiento y autonomía.

Para esto, Rodríguez señaló que es necesario el trabajo con la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas. Sin embargo, no toda la vigilancia se realiza con agentes nacionales. Actualmente, el “control de las cárceles tiene la ayuda de una unidad antimafia de Italia”.

La Inteligencia italiana está concentrada principalmente en la vigilancia de la Penitenciaría del Litoral en la que, desde hace algunos meses, sobrevuelan con drones. Esto ha permitido captar el ingreso de objetos prohibidos.

Camiones con doble fondo

Las grabaciones de los drones han permitido captar un alto grado de contaminación de grupos que llevan armas de todo calibre al interior de esa cárcel, ubicada en Guayaquil, provincia de Guayas.

En los videos, que pudo atestiguar este Diario, se observa cómo los presos reciben armas, licor y posiblemente droga a través de camiones que llevan la comida, en un doble fondo.

Además, se ve a personas que sueldan puertas y que hacen custodia en distintas partes de un pabellón con armas de alto calibre, que caminan sin restricciones en el interior de esa cárcel.

En las grabaciones también se pueden distinguir los rostros de quienes ayudan a la descarga de estos artículos prohibidos.

Ante las evidencias del poder bélico que tienen las bandas dentro de la cárcel, se ha formado un grupo de intervención militar exclusivo. Estos uniformados han recibido formación para intervención en las cárceles con armamento letal.     

 Otras fuentes de este Diario han detallado que en cárceles, como la de Cotopaxi, las armas ingresan en los quintales de arroz y de azúcar.

 La nueva división de las cárceles

Por eso, otra de las estrategias –según Rodríguez–  será dividir los centros carcelarios en tres tipos de centro (A-B-C), que irán de mínima, mediana y máxima seguridad, para estas últimas se deberá designar más guías penitenciarios.

También se busca potenciar al 100%, con tecnología, la cárcel de máxima seguridad La Roca, la cual tiene cerca de 20 presos, aunque tiene una capacidad para albergar 100 personas.

Hay alianzas con grupos de Inteligencia de Brasil y Estados Unidos. Rodríguez tenía trazada una hoja de ruta hasta 2025, pero los planes se ejecutarán hasta este año, ante la muerte cruzada que adelanta las elecciones.

Para lograr los cambios y la sostenibilidad hay cinco ejes de trabajo para los cuales destinarán cerca de 17 millones dólares. Esos recursos se destinarán a equipamiento tecnológico e infraestructura. Uno de los puntos en los que se proyectan más cambios es en la distribución de los pabellones y las celdas de la Penitenciaría del Litoral. (DLH)

Ejes de trabajo

Plan SNAI 2022-2025

  • Infraestructura
  • Talento humano
  • Tecnología equipamiento
  • Procesos
  • Tema normativo – jurídico

*Ante la muerte cruzada, el plan concluirá con el Gobierno de Guillermo Lasso.

“No hay que cantar victoria, lo que nosotros buscamos es sostenibilidad. Vamos en tres fases”, Guillermo Rodríguez, director del SNAI.

En 2022, el SNAI realizó más de 2.000 traslados internos de reos, por seguridad. En lo que va de 2023, son cerca de 700 traslados.