Partamos del principio que todo cosa tiene vida útil determinada, y por tanto merece mucho cuidado y oportuno mantenimiento. El Estado y las personas conseguirían mucho beneficio social y económico si incorporaran políticas de prevención. En salud, vialidad, transporte; podrían ahorrarse millones de dólares y salvar muchas vidas. Solamente corresponde asignar responsabilidad a cada institución, el Ministerio de Salud, debe implementar la medicina preventiva familiar obligatoria, con atención domiciliaria. El Ministerio de Transportes y Obras Públicas, con mantenimiento regular en carreteras.
La Policía Nacional, y Municipal , asumirán el control sobrio de los choferes profesionales, para evitar fatales accidentes. Existen entidades específicas responsables de la gestación y natalidad, cuyo control oportuno y preventivo debe garantizar el nacimiento y la vida humana; la familia que no desea procrear debe planificar, para evitar llegar al aborto. La educación también exige ayuda presupuestarias y de orientación vocacional, el Ministerio de Educación debe planificar desde el jardín, para descubrir las tendencias profesionales y habilidades de los bachilleres, de modo que, en la etapa universitaria ingresen sin examen previo a la carrera de su elección a la academia, así evitaremos traumas y fracasos profesionales, a nadie le satisface estudiar lo que no es de su agrado ni están con solvencia economica para ir a otras ciudades.
Necesitamos cambios estructurales profundos en la salud y la educación fundamentalmente. Fidel Castro dijo: “No luchamos por gloria ni por honores, luchamos por ideales”. Y Albert Einstein dijo: “Los intelectuales resuelven problema, los genios los previenen”. Luchemos por la aplicación de políticas sociales preventivas, que debe aplicar el estado permanentemente, con la finalidad de tener una sociedad sana y productiva.
Armando Daza Quiñonez