Jaque al rey

Tras conocerse la orden de prisión contra el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, está en vilo el futuro político no solo del exdirigente sindical, sino el del país entero.

De ese modo, comenzó el jueves un capítulo que podría significar la muerte política del exmandatario o un desenlace que aún resulta incierto. Es que, a pesar de los procesos judiciales en su contra, Lula sigue siendo el político más popular de Brasil, con 36% de intención de voto a menos de 9 meses para las elecciones presidenciales. Su casi inevitable salida de la competencia deja un vacío difícil de llenar.

Con la mancha de la corrupción que todo lo tiñe en Brasil, no se vislumbra la figura que pueda compensar el carisma del líder caído en desgracia. Sin duda, el obrero metalúrgico que llegó hace 15 años a la Presidencia de Brasil cambió el panorama continental. Por eso, la decisión judicial abre un camino incierto, pues el carisma de Lula ha sido el soporte de la política brasileña en este siglo.

Lo destacable en este caso es que la condena a Lula es un ejemplo de cómo debe funcionar la Justicia y que los expresidentes, por más populares que sean, también pueden ir a la cárcel (como ya ha ocurrido en Perú y Guatemala).

Lula parecía intocable, pero lo alcanzaron las denuncias de la Operación Lava Jato, el esquema de sobreprecios y sobornos pagados por Odebrecht y otras empresas de la construcción. Pero, en definitiva, es una pequeñez si se compara con lo que altos funcionarios se han robado en Ecuador. Y aquí no pasa nada.


La sabiduría nos llega cuando ya no nos sirve de nada”. Gabriel García Márquez. Escritor y periodista colombiano (1927-2014)¡Hombre de América! Hombre torrente y cataclismo, con una mordedura de
llamas en el pecho”. Gonzalo Escudero. Poeta y diplomático ecuatoriano (1903-1971)