Los ecuatorianos jamás deberán olvidar esta escena: los pocos correístas que quedan mostrando orgullosos sus papeletas luego de votar ‘No’ en todas las preguntas de la consulta popular. En todas, incluso en aquella que determinaba la imprescriptibilidad de las violaciones a los niños.
El año pasado el país se estremeció al darse cuenta de que decenas y decenas dhabían sido violados sistemáticamente en escuelas y colegios. ¡Cuántos casos más habrá! Según la Unicef, ningún crimen debe ser considerado peor que violar a un niño.
¿Por qué era importante declarar la imprescriptibilidad? Porque muchas de las víctimas, o sus padres, no denuncian estos hechos sino hasta varios años después, cuando han vencido el miedo. El problema es que el paso del tiempo hacía imposible la judicialización del caso y provocaba que el violador quedara impune y se paseara descaradamente por la calle.
El voto correísta, que alcanzó más del 40% en Manabí, pretendía que esos violadores mantengan ese ‘premio’ de impunidad. El país debe grabarse eso para siempre.
Las organizaciones de defensa de los derechos de los niños dijeron el lunes una verdad: es una pena que un tema como este, que debería haber tenido el apoyo absoluto de todos los ecuatorianos, haya terminado tan politizado, que los niños a muchos no les importaron.
Por fortuna, la mayoría votó pensando en esas inocencias acribilladas. Pasó la consulta pero Ecuador tiene una deuda enorme con las víctimas. Qué nunca nos dejen de indignar sus casos, que nunca podamos dormir en paz mientras sigan siendo violados.
No son las sílabas que salen de los labios y de las lenguas las que unen a los corazones”. Gibran Jalil Gibran Escritor libanés (1883-1931)
Un diminuto cambio hoy nos lleva a un mañana dramáticamente distinto”. Richard Bach Escritor estadounidense (1936)