Diez años de unipartidismo convirtieron al Estado en uno de los más corruptos. Los indicadores de gestión global coinciden: el fisco revolucionario es: 1) Cartel político exclusivo del régimen, 2) lucrativa empresa electoral que usa medios públicos para propaganda gratis, 3) mafia corporativa que trafica contratos a dedo, 4) aparato de lavado de activos para el buen vivir con deuda ajena, 5) feudo de nepotismo clientelar, y 6) cloaca desbordada de la que salta pus donde se apriete.
Paul Tapia Goya
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