Portoviejo, La Hora
Lorenzo Voltolini no escogió un día cualquiera para posesionarse como arzobispo de Portoviejo. Él tomó precisamente el día de la fiesta de la Santa Cruz para asumir su cargo como principal autoridad de la Iglesia Católica en Manabí.
Esta conmemoración, basada en el ícono central del cristianismo, tiene un simbolismo especial acorde a la ocasión, explica el sacerdote Néstor Bedoya. Significa “fidelidad, obediencia, un camino a seguir”.
El clérigo señala que asumir la responsabilidad de la Arquidiócesis de Manabí no es tarea fácil. Por ello en esta ocasión se reafirma la labor de pastor que la máxima autoridad eclesial tiene con sus creyentes. Y esto no solo en palabras, sino también en muchos símbolos que se verán hoy durante la posesión.
En la ceremonia especial que se desarrollará desde las 10h00 en la Catedral Metropolitana Jesús del Buen Pastor, Ruiz Navas entregará a Voltolini el báculo de arzobispo, que representa al pastor.
“No solo significa que él es quien guía sino que todos estamos unidos en comunidad bajo un solo pastor”, explica Bedoya.
Por esta significación, explica el sacerdote, lo más importante del evento del hoy no es la posesión en sí, ni la presencia de la cúpula de la Iglesia Católica, sino la presencia de la gente, de los creyentes y feligreses, quienes forman la Iglesia. “No tiene sentido un pastor sin rebaño”, dijo.
Ilustres visitantes
La ceremonia de hoy contará con la presencia de altos mandos de la Iglesia, como el nuncio apostólico en Ecuador, Giacomo Guido Ottonello, quien será el encargado, en nombre del Papa Benedicto XVI, de posesionar a Voltolini.
Asimismo, participarán del acto el secretario de la nunciatura Inazio Ceffalia y al menos 20 arzobispos y obispos de todo el país.
Desde Italia no podían faltar familiares como dos hermanas y una prima de Voltolini. También, desde la diócesis de Brescia, provincia natal del nuevo arzobispo, llegará una comisión.
Además formarán parte de la ceremonia todos los sacerdotes, religiosos y religiosas de la Arquidiócesis de Portoviejo. Se espera la participación especial de canto gregoriano preparada por miembros del Seminario Mayor San Pedro.
¿Adiós a Ruiz Navas?
Luego de 18 años en la arquidiócesis de Portoviejo para Manabí y ser el primero en ocupar este cargo, Mario Ruiz Navas deja su función. El conocido clérigo ha expresado que no se alejará de la provincia y mucho menos de la institución eclesial.
Con 77 años, Ruiz deja su cargo al que por muchos años fue uno de sus obispos auxiliares y con quien compartió tanto en Latacunga (donde por 21 años fue arzobispo) como en Manabí.
Ahora Ruiz ha dicho que se dedicará tanto a pasar en su casa en Crucita y en la de su natal Pujilí (Cotopaxi). Pero no estará desocupado: hace semanas atrás la Iglesia lo designó para que sea una especie de observador y el interlocutor de las opiniones de ésta ante la Asamblea Constituyente que sesionará en Montecristi.
En Manabí, Ruiz ha dejado su huella en decenas de templos y obras como la reconstrucción de la Catedral Metropolitana, así como el seminario mayor San Pedro. En el país trascendió como presidente de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana durante tres periodos.
Simbología del arzobispo
El Escudo
Cada arzobispo tiene un escudo y un lema que representan su filosofía, su concepción intelectual y espiritual sobre la cual va a dirigir su comunidad. Mario Ruiz Navas usó el triángulo (que representa a la Santísima Trinidad) en una cruz, junto al lema “Que todos sean uno”. Hoy en la ceremonia de posesión Lorenzo Voltolini presentará su escudo y su lema, que ha sido preparado y meditado con anticipación.
La Mitra
Es un bonete alto de forma cónica, del que cuelgan dos tiras en su parte posterior, que usan los obispos y arzobispos. Llevar la mitra sobre la cabeza, quiere decir que lleva la ciencia tanto del antiguo como del nuevo testamento, así como el rostro de Moisés que mostraba ases luminosos sobre su cabeza.
El Palio
Es una banda de lana blanca en forma de collarín, adornada con seis cruces de seda negra. Es la insignia exclusiva de los arzobispos metropolitanos. Se la envía directamente desde Roma el Papa como distintivo de su especial dignidad.
La cruz pectoral
La usan los Obispos, Arzobispos y Cardenales. Se la lleva sobre el pecho y en muchas ocasiones está adornada con piedras preciosas. Es usada, además, por los sacerdotes de grados superiores.
Solideo
Los obispos y arzobispos llevan un pequeño sombrero redondo de color morado conocido como solideo. En latín significa «solo a Dios» y es un casquete que cubre la parte posterior de la cabeza. Los Papas lo usan de color blanco, los Cardenales de rojo y los Obispos y Arzobispos violeta. Este artículo se lo quitan los prelados al momento de la consagración de la hostia.