La trata de personas es un delito transnacional que va en aumento y afecta especialmente a los nis, nis y adolescentes, desde junio pasado es ya un delito penado en el Ecuador.
La trata de personas es un delito donde la vtima es engada con el propito de ser explotada sexual, laboral, y ficamente (trico de ganos), este delito no es solo internacional sino tambi nacional; es decir que las vtimas son trasladadas de una ciudad a otra a fin de que no puedan ser rescatados por sus familiares o tambi salen del pa, generalmente a Pery Colombia para trabajar en la prostituci.
Debate
Este tema fue discutido entre los ds jueves y viernes de la tima semana. El seminario contcon el apoyo de la Organizaci de los Estados Americanos (OEA) a trav de la Comisi Interamericana de Mujeres (CIM) y la Organizaci Internacional de Trabajo (OIT), con el respaldo de la embajada de Estados Unidos y el Ministerio de Relaciones Exteriores del Ecuador.
La temica principal se desarrollen torno a la prostituci, que afecta especialmente a las mujeres en edad adolescente, como la forma m com de la trata de personas, la que al igual que la pornograf infantil, el plagio de personas, la venta de ganos y todo tipo de explotaci que atenta contra la moralidad y libertad, especialmente de los nis y adolescentes.
Existe toda una red
De acuerdo a la experta en el tratamiento de las vtimas afectadas por la explotaci sexual, Silvana Espinosa, de la Fundaci Quimera, los proxenetas (personas dedicadas a la explotaci sexual), no actn solos sino que junto a ellos existe toda una red de personas que participan en la trata de personas tanto a nivel nacional como internacional.
Procedimiento
Esta red funciona de dos formas: a trav del enganche y mediante el rapto.
En el enganche, antes de atrapar a la vtima, que generalmente es una adolescente, se busca una persona que se haga su amiga; ta le seduce para que inicie una amistad con el proxeneta y te ingrese a la familia y obtenga su confianza.
A continuaci viene el enamoramiento de la vtima con el proxeneta, quien luego de varios ofrecimientos a ta y a su familia, lleva a la joven a vivir con ; los primeros ds hay regalos y paseos. Todo esto hasta que se tramite la documentaci falsa de mayor de edad de la vtima.
Cuando est listos los papeles, le informan a la adolescente que su trabajo es prostituirse y en caso de que ta no acepte, vienen los golpes y todo tipo de agresi.
La otra forma es el rapto, en donde no existe ning paso previo, sino el de la agresi, se roba a la vtima y le trasladan si es posible a otro pa, en donde de igual forma con documentaci falsa tiene la obligaci de prostituirse y todo el dinero que cobra entregarle al proxeneta quien vigila que no se quede con nada de dinero.
Denuncia de terceros
En cualquiera de los dos casos, de acuerdo a Silvana Espinosa, las jenes son agredidas y violentadas en sus derechos elementales y generalmente son terceras personas las que denuncian.
Son excepcionales los casos en que la propia vtima demanda al agresor, a veces por miedo o porque se encuentra raptada y controlada todo el tiempo.
Dentro de esta red, a m del proxeneta, intervienen los dues de los prostulos, los administradores de tos, las personas que fungen de amigas y en general todas las que conocen del delito y no lo denuncian.
Ante esta situaci, las personas que trabajan directamente en la ayuda a las vtimas de explotaci sexual, creen que el castigo debe ampliarse para todos los que participan en este delito.
ANISIS
Consuelo Bowen, representante del Consejo Nacional de Mujeres (Conamu).
«Aunque no existen cifras exactas se conoce que el problema de la trata de personas avanza latente en el pa.
Es un problema que ha existido desde antes; sin embargo ha ido en aumento, ante lo cual es fundamental la decisi del Estado para combatir este delito que afecta especialmente a los nis, nis y adolescentes.
Hay que tomar en cuenta que el tratamiento de este problema no depende solo del gobierno, sino de todas las instituciones del Estado a fin de coordinar las acciones para combatir este delito que hace poco tiempo se penalizen el cigo de procedimiento penal.
Es importante que el pa reconozca este delito como una amenaza latente y luego depende de todos para evitar la explotaci especialmente a las adolescentes. No debe existir comercio sexual con menores de edad.
Hay que endurecer las layes contra la cadena de personas que trabaja con los proxenetas, con el fin de que tos reciban su castigo y las vtimas se sientan respaldadas por el Estado. Esa deber ser la v».
OPINIONES
«Es un delito utilizar a los nis, nis y adolescentes para el comercio sexual, su consentimiento no cuenta».
Angica Porras, representante de la Organizaci Internacional del Trabajo (OIT).
«Es importante dar a conocer la ley contra la explotaci sexual para que la vtima tenga el valor de denunciar».
Victoria Moncayo, delegada titular del Ecuador ante la Comisi Interamericana de las Mujeres.
Lo estimado
5.200 menores de edad est en las redes de explotaci sexual en Ecuador.