Nunca una cumbre iberoamericana hab estado tan amenazada por la suspensi como esta XIII de Santa Cruz de la Sierra, en Bolivia. La «mini Revoluci de Octubre» que expulsdel poder al agringado Schez de Lozada pudo dar al traste con el evento que milagrosamente salvpor fin la continuidad de estos encuentros.
Sin embargo, esta cumbre salvada de la borrasca que la explosi popular causara en el pa de mayor indena, pasa paradicamente a la historia como la cumbre de la esperanza. Las razones son obvias: Bolivia obtuvo apoyo polico, recursos y restaursu deteriorada imagen internacional.
Por otra parte, se logrluego de 12 insidos encuentros, la formaci de una Secretar Permanente que supervisarperiicamente el cumplimiento de los acuerdos y cuya composici heterenea debe garantizar su imparcialidad y evitar que no prevalezca el inter de un pa en particular.
Algunas presiones externas no consiguieron enturbiar el tradicional espitu solidario de esta cumbre donde han sabido compartir figuras tan opuestas como Fidel Castro y JosMar Aznar, aunque en ocasiones como en la de Panamel fuego verbal se haya desbordado entre el salvadore Flores y el cubano Castro, con iricas pinceladas del espal Aznar y el exabrupto del uruguayo Battle. Desde entonces el presidente cubano pareciretirarse de esos lares y su tercera ausencia consecutiva fue motivo de profunda decepci que la prensa boliviana reflejprofusamente.
La sombra del Alca
EEUU no pudo lograr una condena a Cuba por violaci de los derechos humanos, pese a que por algunas cancillers latinoamericanas circularon sus «instrucciones». Pero tampoco hubo una condena al ea de Libre Comercio de las Amicas (Alca) cuyo nombre no se mencionen ning documento oficial.
Pese al silencio oficial sobre el Alca, su cercan levanttensiones y marcprofundamente el clima polico de la reuni, aunque algunas delegaciones, como la ecuatoriana, -en voz de Ivonne Baki, ministra de Comercio Exterior- insiste en que el pa estpreparado para ingresar al Alca y que los productos tradicionales no entran en ese acuerdo.
A pesar de que estuvo m que claro que nadie quer molestar a EEUU , sla Cumbre de Santa Cruz incluyen su Declaraci el tema de los subsidios agrolas con los que ese pa sobreprotege desmedidamente a sus productores en desmedro de los que provienen de otros paes y que perecen en una competencia muy desleal.
Santa Cruz de la Sierra pudo ser la tima gran reuni colectiva de los paes de Amica Latina antes de hacer del Alca un hecho consumado, pero quedclaro que los riesgos de explosi social ante su instauraci no se desvanecen. El presidente Gutirez fue uno de los que declarque no ve tantos peligros en el Alca, lo que estaba en franca contradicci con las conclusiones del Foro Social Alternativo que sesion-en un hecho sin precedentes- como una cumbre paralela a la de los presidentes y jefes de Estado.
A las buenas o a las malas
El propio ler indena boliviano, Evo Morales, declaren tono beligerante en Santa Cruz, que al neoliberalismo y sus expresiones como el propio Alca hay que «tumbarlo a las buenas o a las malas».
Sin embargo, el ler cocalero boliviano quien insiste en que la unidad es la ica v para solucionar los problemas de las grandes masas latinoamericanas, no pudo responder convincentemente a la pregunta de cu es esa unidad, cuando ni los indenas est totalmente unidos.
Igualmente, fue notoria la sinton de Evo Morales y el resto de la dirigencia indena con el actual mandatario boliviano Carlos Mesa, en inequoca sel de que a los cocaleros les hace falta acercarse al poder polico so pena de aislarse. Queda claro que no habrinclusi social posible -el espitu enarbolado por la XIII Cumbre- si hay excluidos, expresi que fue inteligentemente remarcada por Mesa en el discurso inaugural del encuentro de presidentes y jefes de Estado, luego de la apasionada intervenci en dicho plenario de uno de los dirigentes del Foro Social Alternativo quien sorprendiera por el amplio alcance de algunos de los puntos concluyentes de tal encuentro, que fueron desde una condena irreconciliable con el Alca hasta otros temas de profundo alcance social como la libertad sexual.
No olvidar las lecciones
Pero tambi, los a frescos acontecimientos del «peque Octubre» boliviano alertan de que una revoluci inconclusa alimenta insatisfacciones y crea condiciones para el rebrote del autoritarismo.
Resultm que vidente, que el Presidente de Bolivia ha tenido muy en cuenta ese principio al convocar a la cumbre alternativa o foro social de los excluidos que tambi marcun momento particular dentro de una cumbre iberoamericana que se propuso romper esquemas y sacudir la tradicional inmovilidad que ha aquejado a estos eventos.
La ausencia del presidente Fidel Castro hizo que mucha de la atenci se concentrara en la presencia del ser Kofi Annan, quien marcara el debut de un Secretario General de las Naciones Unidas en cumbres iberoamericanas, aparte de la simpat que siempre genera en los sectores populares de la ciudad sede la asistencia del presidente venezolano Hugo Chez quien junto a un mandatario brasile Lula da Silva m mesurado y contenido que en otras ocasiones, se convirtieron en figuras centrales del foro social alternativo.
Escuchar y resolver
Sin lugar a dudas la nueva lea de gobierno que Bolivia propugna, «de abrirse a los sectores sociales sin temor alguno» y «despojarse de posiciones radicales y de dogmas», acaparla atenci de la prensa internacional y marcun punto de reflexi para algunos gobernantes que pueden ver repetidos los recientes acontecimientos de Bolivia en su propio pa, dada la similitud de condiciones, como es el propio caso del Ecuador.
El Presidente boliviano, quien dio muestras de su calidad como orador, recordsin rodeos que los gobernantes de su pa no hicieron nada por disminuir las condiciones de pobreza ni mucho menos generaron condiciones sociales de igualdad para los ciudadanos, por lo que las consecuencias estuvieron a punto de dar al traste con la continuidad democrica de esa naci del centro de Suramica.
Un planteamiento que sin dudas tuvo un eco positivo entre todos los mandatarios reunidos en Santa Cruz fue la necesidad de relanzar el proceso de integraci regional, un tema que sella posibilidad de una dinica nueva que convierta a las citas iberoamericanas en m productivas y que sean capaces de aportar m allde meros conceptos y signifiquen «un espacio de debate, de discusi y de posici en el contexto de las naciones».
Audiencia dividida
Sin dudas el ico discurso que logrdividir a la audiencia de la Cumbre fue el pronunciado en la sesi inaugural por Carlos Eduardo Medina, representante del Encuentro Social Alternativo, la llamada cumbre paralela que entre sus conclusiones se opuso a siete medidas, pidiseis leyes y una soluci de tipo social.
Las palabras del dirigente indena del oriente boliviano encontraron aplausos y simples oyentes, pues se opuso radicalmente a la negociaci del Alca, rechaztajantemente la venta del gas boliviano, la presencia de transnacionales en el pa y el ingreso de productos transgicos a la regi, a la vez que declarinoperante al sistema neoliberal, los fundamentalismos en Bolivia y la impunidad. (AGC)
Frases de la Cumbre
«Bolivia tuvo mar, y aunque algunos se molesten, lo lamento mucho…No es justo que se le haya arrebatado la salida al mar». (Hugo Chez, presidente de Venezuela)
«En el centro mismo de la mayor de los desafs de la regi estla gobernabilidad democrica». (Kofi Annan, secretario general de la ONU)
«Somos servidores plicos y la cabeza de nuestros pueblos. Pero la mejor cabeza es la que sirve bien a la gente que la eligi. (Carlos Mesa, presidente de Bolivia).
«La Secretar Permanente de la Cumbre es una idea prematura, que requiere estudio y tiempo para examinarla». (Carlos Lage, vicepresidente de Cuba)