Se espera superar fácilmente las 1,7 millones de personas que visitaron su santuario el año anterior.
Este año los peregrinos comenzaron a llegar a El Cisne incluso antes de agosto y el inicio de las fiestas en honor a la Virgen, lo que es una muestra más de la expansión de la devoción que se podría ratificar durante este feriado y la romería que se verá favorecida aún más porque su último tramo se lo cumplirá en un día sábado.
Ayer ya fue difícil acceder a la parroquia. Cientos de vehículos pugnaban por llegar tan solo al parqueadero del cementerio ubicado a un kilómetro y medio del centro poblado, en donde era fácil darse cuenta del origen de los fieles por las placas que de todas las provincias del país, incluso de Colombia, así como por los nombres de las unidades de transporte.
El padre Armando Jiménez, rector de la Basílica del Cisne, destaca que lo que mueve a la personas a viajar es el amor a la Virgen en esta advocación, la cual asegura que se ha propagado mucho a nivel nacional e internacional por la protección y milagros que se le atribuyen, los cuales la gente los va divulgando.
Además, se ha visto que la devoción a la Sagrada Imagen también es parte de la cultura y tradición de los lojanos, quienes al viajar a otras provincias de la Costa y el Oriente han organizado a la gente para celebrar misas, novenas y fiestas en su honor, lo cual también ha ocurrido en el exterior teniendo el impulso de los azuayos.
Pero la motivación para que cada vez más gente llegue al Santuario también se debe a que la propia iglesia organiza visitas con la imagen peregrina de la Virgen del Cisne a diferentes partes del país en donde piden su presencia, lo que últimamente también está ocurriendo a nivel internacional.
Los priostes difunden la fe
El padre Armando Jiménez destaca que los priostes tienen un papel fundamental no solo en las fiestas. Explica que en la actualidad existen nueve comités, algunos de los cuales comenzaron como grupos familiares o de amigos y en la actualidad están abarcando algunas provincias. Con ellos se mantienen tres a cuatro reuniones al año para organizar actividades.
“Ellos son, por ejemplo, los que nos ayudan a repartir estampas, programas, afiches de la Santísima Virgen, ellos son los que se encargan de invitar a la gente para que vengan”, comenta el sacerdote, destacando que hay grupos que están ayudando en la evangelización atrayendo a la gente con la Imagen de la Virgen del Cisne, para difundir la palabra de Dios.
Un evento mediático
Los medios de comunicación también han contribuido a que la devoción se propague, pues a lo largo de todo el año en el santuario reciben la visita de medios impresos, radiales y televisivos nacionales e internacionales para realizar amplios reportajes sobre este fenómeno religioso que mueve a millones de personas todos los años. (CAB)
Tome nota
Las complicaciones que existen en estos días para llegar a El Cisne hacen que muchas personas anticipen su visita.
Días de mayor concurrencia
Los días de mayor presencia de fieles en El Cisne son el 14 y 15 de agosto. El 14 se programa una procesión de la Sagrada Imagen de la Virgen hasta el campo mariano en donde se celebra una misa campal a las 1800, la cual será presidida por Monseñor Manuel Valarezo, Obispo Emérito de Galápagos.
Para la jornada del 15 se programa igualmente una procesión hasta el campo mariano a las 0930 y a las 1000 se celebrará una eucaristía por el Obispo de Loja, Alfredo José Espinoza, con lo cual se concluyen las fiestas.
Cabe indicar que el 17 de agosto se celebrará la eucaristía de despedida a las 0600; a las 0700 se hará la entrega formal de la custodia de la Virgen del Cisne a la Policía Nacional; a las 0720 se realizará un homenaje de despedida por parte del pueblo del Cisne; a las 0730 iniciará la romería, a las 1030 la imagen ingresará a la hacienda La Bendita donde se celebrará la misa; a las 1400 se espera su arribo a San Pedro de la Bendita.
La Virgen vestirá de manabita
El cariño hacia la Imagen de la Virgen del Cisne ha hecho que sea una tradición regalarle hermosos vestidos para lucirlos durante su permanencia en la basílica así como durante la peregrinación y su permanencia en los templos en donde será recibida.
Se acostumbra que durante la caminata luzca atuendos de campesina, lo que tendrá una mayor relevancia este año. El Obispo de la Diócesis de Loja, Alfredo José Espinoza ha donado para la jornada del 20 de agosto un traje típico de la campesina manabita que llevará los clores de la bandera de esa provincia, como una forma de solidarizarse con las víctimas del terremoto.
Como complemento a este gesto se ha coordinado que el Arzobispo de Portoviejo, Mons. Lorenzo Voltolini sea quien la reciba en Loja y celebre la misa de bienvenida.
Comercio en auge
Esta temporada del año es crucial para os habitantes de El Cisne, así como para quienes llegan al sitio con el objetivo de realizar actividades comerciales, como el caso de Rosa Quishpe quien desde hace 15 años vende velas a las afueras de la Basílica.
Rosa indica que en el día vende de 30 a 40 paquetes de velas al día, aunque este año han estado limitados tanto por la situación económica del país como por el incremento de vendedores ambulantes que desde la carretera ofrecen los mismos productos. No obstante destaca que en esta temporada les permite sostener a su familia por varios meses y especialmente cubrir los gastos del inicio de clases.